Karol, Jamás Te Irás De Mi Lado.

¿Esto Es Vida?

"BASADA EN UNA HISTORIA VEROSÍMIL"

"Una vida que se repita una y otra vez, no es vida es solo algo continuo."

Me considero una persona poco sociable. Mis padres siempre  dicen que la adolescencia es la etapa más bonita de la vida, pero yo prefiero quedarme en mi cuarto, sumergida en la lectura durante horas, escuchando música o haciendo postres.

Menudo me pregunto: ¿qué se sentirá tener a alguien a quien contarle mi día? ¿Qué se siente tener a alguien a mi lado que me apoye cuando más lo necesite? A veces, aunque en casa mis padres son amorosos y siempre están pendientes de mí, siento que me falta algo más. Ellos trabajan duro y me brindan su cariño, pero anhelo esa conexión especial que solo se siente en un amor diferente. Me cuestiono constantemente cómo será ser amada de esa manera, con la complicidad y el apoyo que solo un compañero puede ofrecer.

Escuché que tocaron a mi puerta.

—Ya es hora de cenar —su voz era insistente—.  ¿No querrás que se enfríe tu comida, verdad?

—No, mamá. Dame unos minutos.

—Karol, ¿no crees que deberías, no sé... salir de compras o al cine con tus amigos? Pasas mucho tiempo encerrada.

—Mamá, ya hemos hablado sobre eso... No quiero. Las personas en la mayoría son complicadas ; tú misma lo dijiste. Además,  me sofoca estar donde hay muchas personas.

—Karol, hija, eres hermosa... Y si es por eso, pasas desapercibido.

—Mamá, por favor —mi voz era chichona—. No quiero hablar más del tema. Se me quitó el hambre —suspiré lentamente—. Me iré a mi cuarto.

—Hija...

—¡No, no, déjala! ¡Algún día mi pequeña se dará cuenta de lo hermosa que es! —murmuro —Alex, mi padre, en voz alta.

—Y espero que así sea —añadió mi madre.

Estaba sentada en la ventana, pensando a la luz de la luna. Llegará alguien que me ame, un amor verdadero, me dije. ¡Ja!,—reí un poco—. Eso solo pasa en los cuentos de hadas. Miré hacia la izquierda y me percaté de que ya era tarde.

De repente, un ruido extraño proveniente del jardín me hizo saltar. Me acerqué a la ventana y miré una sombra moverse rápidamente entre los árboles. Mi corazón comenzó a latir con fuerza. ¿Quién podría estar ahí a estas horas? La curiosidad y el miedo se mezclaban en mi interior.

Decidí bajar las escaleras de puntillas para causar el mejor ruido posible. Al llegar al jardín, observé como una figura encapuchada que se acercaba lentamente a la casa. Mi respiración se aceleró y, sin pensarlo dos veces, corrí hacia la puerta trasera para cerrarla con llave.

Escuché el ringtone de mi celular.

Quiero que sepas que no estás sola. Alguien te está observando, siempre —Mi voz tembló de asombro mientras leía el mensaje que acababa de llegar a mi celular.

El terror se apoderó de mí mientras trataba de entender lo que estaba sucediendo. ¿Quién era? Las preguntas se agolpaban en mi mente, pero no había respuestas. Solo quedaba la incertidumbre y el miedo a lo desconocido.

Apagué mi celular y decidí acostarme nuevamente en mi cama, esperando que se iluminara mi ventana.

Escritora

Gracias por su apoyo, espero que les guste, comenten que les parece ✨ Con cariño y gratitud Kamilah Zambrano 💋 📚  No soy escritora experta gracias por darle una oportunidad a mi historia ✨