—La cosa es que el amor te puede convencer de hacer estupideces...
—Pero no te confundas entre el amor y la obsesión, son cosas muy diferentes.
Hubo una pequeña pausa, ambos nos miramos a los ojos, como siempre me entusiasmó escuchar su opinión, ella, por otro lado, analizó de nuevo lo que había dicho, me encantaba esa parte de ella.
—Pero que sería del amor sin un poco de obsesión.
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200 CARTAS
PoesíaY con el pasar del tiempo aprendí que este no da tregua, la mente tampoco... Esta es mi condena por amar tanto a alguien que me quiso tan poco, aun así no me arrepiento, pues la experiencia no tiene precio y esta historia será testigo de eso.