Bleu Jeudi 《muke》♡

t r o i s

Viernes.

Ese día era completamente diferente al anterior, aún hacia un poco de frío, pero era un frío agradable. Aún así, Michael no se sentía muy animado. No había dormido muy bien y las ojeras púrpura resultaban como pintura derramada sobre su pálida piel.

Esperaba con la cabeza gacha en la misma banca en la que se sentaba siempre, tampoco tenía ánimo de observar a la gente. Ni siquiera quería ir a la universidad.
Pero ahí estaba. Por que no quería quedarse en las mismas cuatro paredes que sus odiosos padres.
Habían llegado de visita y se la pasaban molestando al pobre chico sobre la escuela, sus dibujos, y el color de su cabello.

El tren llegó y con pocos ánimos esperó a que toda la gente subiera para después ir a su asiento con mesita.
Se quitó su chamarra, dejó su mochila a un lado y abrió su cuadernillo en una página que tenía un dibujo incompleto.
Era una hermosa flor, de la cual desconocía el nombre, que había visto el día anterior con su amigo Ashton.
Lo último que Michael quería era ir a su casa y encontrarse con Karen y Daryl.
En el tren siguió dibujando la pequeña y borrosa flor hasta que sintió movimiento en el tren, después de detenerse en una estación. Levantó la vista para saber quien lo había distraído.

Era el chico de ojos azules.

El rubio se sentó en el mismo lugar que el día anterior. También llevaba los mismos audífonos, pero ésta vez no movía su pie al ritmo de la música, miraba distante hacia la ventanilla que mostraba la ciudad.

Michael se obligó a apartar la mirada y continuar con su dibujo, pero éste ya no le parecía ni un poquito interesante.

Levantó la vista con cautela y descubrió al chico de ojos azules mirando en su dirección, no lo veía a él, sino al dibujo incompleto de la flor. Parecía que le quería decir algo, después se encontró con los curiosos ojos de Michael y apartó la vista sonrojado.

Con nuevo interés, el peli verde paso a una hoja en blando y comenzó a dibujar los ojos del chico, que se veían un poco más oscuros que el día anterior, posiblemente por que el sol brillaba.

Logró esconder el dibujo en el momento en el que el rubio se levantó y fue hacia la puerta del tren.

El chico bajó dejando a Michael con la duda que reflejaba aquella mirada azul cuando se fijó en su dibujo.

Un largo día lo esperaba.

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