★ M̺͆i̺͆ e̺͆s̺͆t̺͆r̺͆e̺͆l̺͆l̺͆a̺͆ d̺͆e̺͆ l̺͆u̺͆z̺͆ ★Spruan

★1̺͆2★

(POV's Juan)

Desperté, abrí lentamente mis ojos para luego tallarlos levemente con mi mano, mire un poco a mi alrededor, no estaba en la casa de Spreen , estaba en la iglesia, en la iglesia del Profeta, mi corazón empezó a latir con fuerza, los recuerdos y traumas que tuve con aquel hombre volvieron a aparecer, sinceramente, a veces no hubiera querido volver a vivir, pues la última vez que ví a los demás, todos estaban en mi contra, destruyeron mi santuario, me hirieron, pero esa no era la única razón por la cuál no queria vivir, la muerte de mi hermano y el revivir mis traumas con el Profeta eran otras de las razones, prácticamente la única razón para querer vivir, es Spreen , me siento muy bien a su lado, es como si la brisa del viento cálido topara con mi cara, me hace sentir protegido y relajado, hace tiempo que somos amigos , pero ahora ya no se lo que en verdad siento por el, ya no se si solo considero una amistad, ha hecho tanto por mi que, perdí la cuenta, solo estoy seguro de una cosa, lo más probable es que no alcance a revelar mis sentimientos por el, solo me quedan 3 días de vida y no he dado ningún avance para aprovechar mi tiempo, quiero volver a ver a mis "amigos", se que solo puedo ver a dos personas, pero, los extraño.

Seguí moviéndome alrededor de la iglesia, caminaba a paso lento, casi nadie lo sabe pero, hay otra habitación abajo de la iglesia, hay una puerta escondida que dan a unas escaleras, las cuales dan a la habitación de abajo, fui hacia allá topandome con El profeta y Zorman, al parecer tenian una jaula cubierta con una manta, era una jaula grande, al poco tiempo el científico quitó la manta, descubriendo lo que habia dentro de ella. Me acerque un poco más y me quedé espantado, era Spreen con múltiples heridas, una de las más notorias era una cicatriz con la forma de la inicial del profeta , la cicatriz estaba en su mejilla, Spreen tenía un pañuelo en la boca lo que evitaba que hablara, al parecer este estaba soltando varias lágrimas, nunca lo había visto tan vulnerable más que cuando yo mori. Zorman tomo una especie de palo con un cuadro en una de las puntas, coloco el cuadro en una chimenea, sacaron a Spreen de la jaula, este estaba amarrado, El profeta tomo la camisa de Spreen y la quito lentamente, pensé que iba a abusar de él como lo hizo conmigo pero, no, Zorman puso el cuadro del palo, el cual al parecer estaba extremadamente caliente y lo puso en el costado del pecho de Spreen, causando una muy notoria marca, Spreen no tardó en gritar, yo aún estaba asimilando todo, ¿Que hacia Zorman ahí? , ¿Porque le hacen eso a Spreen?. Mi corazón volvió a acelerarse mientras poco a poco me faltaba la respiración.

-Buen trabajo hijo . Le dijo el profeta al científico.

-Gracias padre

En eso desperté, al igual que en el sueño, me faltaba la respiración y mi corazón palpitaba muy rápido , mire a mi lado, Spreen estaba bien, tan solo había sido un sueño, pero parecía muy real, según lo que alguna vez me contaron fue que los sueños son vistazos de otros universos, o, es algo que te pasará o pasará más adelante. El hecho de que tal vez puedo suceder, me puso muy tenso, tal vez todo eso sean solo creencias pero, si lograban ponerme nervioso, no quería que le pasara algo malo a Spreen.

También había otra cosa que me desconcertó, el hecho de que Zorman pueda ser hijo del profeta me daba escalofríos, y pensar que son igual de malvados me causaba miedo, apenas llegué de nuevo y, ya no puedo soportar más, todo inicio mal, desde recordar mis traumas, no poder ver a mis amigos, hasta el hecho de preocuparme por algo que seguramente no pasará.

Talle mis ojos con gentileza , me senté lentamente a la orilla de la cama, ahí estuve por un minuto, en realidad tenía muy pocas fuerzas, si iba a ver a mis amigos habían dos cosas de las cual yo temia, una, no quiero irme otra vez sin poder soltar mis sentimientos hacia Spreen, dos, tengo miedo de como reaccionaran mis amigos al verme, las últimas veces que conviví con ellos no fueron la gran maravilla, aún lo recuerdo...
Si quieres saltar el recuerdo, saltalo, no hay problema, no te perderás de nada.