La llama que enciendes.

Capítulo 14: Desenlace.

Finalizando Enero dan con el paradero del muchacho, gracias a la gran ayuda del tío de Code e información de Amado. Isshiki albergaba varios escondites en zonas donde se movía la droga, pusieron manos a la obra y a todo esto la pandilla ya contaba con el conocimiento de manejo de armas. Avisaron a Sakura que mantuviera personal disponible por cualquier emergencia a lo que ésta quedó atenta. En señal de un policía disfrazado por medio de un woki toki avisó la ubicación del joven y agregó el estado en el que se encontraba, cosa que hizo poner furioso a Iwabee. Naruto posicionó a sus peones y comenzó el plan.

Compra de esclavos, era muy difícil poder contactar con alguien que estuviera en ese rubro, pues no se podía tomar tan a la ligera como la tenencia de otras cosas. Por suerte, encontraron a un nuevo que fue facil de manipular y se arriesgaron a todo. Los padres de los jóvenes se resistían a que sus hijos sean partícipes de tal rescate, pero casi en huelga y con mucha fuerza de voz, los adolescentes pisaron fuerte y fueron bajo la supervisión del gobernador. Había demasiado movimiento extraño, pues Isshiki estaba de visita por ese lugar, y el rubio al enterarse con mayor razón decidió también, ser un participante, porque no era que podía tomar decisiones por su propia cuenta, ahí el bien estar de alguien tan importante como él estaba en manos del consejero. Aun así, tenía un as bajo la manga.

Por otro lado, Kawaki había estado encerrado en una jaula por quince días y luego lo enviaron a los galpones del barrio nuevo, encadenado, sin agua ni comida, con las heridas sin curar, marcado, violado, sucio y drogado permaneció el resto del mes. Otra vez se veía débil, desnutrido y sin ganas de nada y a cada queja, le regalaban una paliza. Isshiki se había aburrido de jugar con él, por lo que, lo abandonó en ese lugar a su suerte, esperando la llegada de Kokatsu para desaparecerlo finalmente.

Comenzando el plan, mientras los peones distraian a los vendedores, Ada, Delta, Code, Naruto e Iwabee se escabulleron metiéndose sigilosamente en los galpones por separado, con un comunicador, se informaban si lo encontraban o no. Tal éxito tuvo el moreno que justo en esa corrida para entrar al siguiente lugar lo ve. Su ira no tenía comparación, sus ojos no podían creerlo. Debía ingresar silenciosamente, pero en vez de eso hizo un escandalo gritando su nombre. Acción que dio pie a que Kawaki abriera los ojos y se volteara lentamente como podía, al estar encadenado de pies y manos en el suelo de espaldas y de costado mucho no podía hacer. Conectaron sus miradas, y de repente se sintieron disparos. Iwabee corrió a ayudarlo, intentando romper las cadenas, pero lo agarraron entre varios para pelear y no tuvo opción. Llevaba un arma, pero solo lo usaría en caso de verse en un grave aprieto según la orden del rubio, pues a Code se le escapó decir que andaban con juguetes peligrosos y recibieron un sermón.

Mientras él lo daba todo por su amor, se escuchaba el tiroteo desde afuera, por momentos Iwabee se sorprendía de ver a un hombre que manejaba un pueblo entero utilizando las armas como si se tratara de algo cotidiano yendo de un lado a otro protegiendo el área donde se encontraban los dos jovenes. Eso lleno de valor al moreno y peleó con todas sus fuerzas contra todos los que estaban ahí. Recibió paliza por donde lo mirarán, pero no se dejó caer de ninguna manera y luego de terminar con el último corrió nuevamente hacia Kawaki tomándolo fuertemente en un abrazo calido, acariciando una de sus mejillas nota lágrimas, sonrió y lo tapó con su chaqueta. Pero la guerra no acababa ahí. Un asesino se acercó ya apuntandoles para matarlos y éste no queriendo hacerlo sacó su arma y gatilló dándole en la cabeza sin más. El castaño se dispuso a romper esas cadenas inmediatamente, porque la cosa estaba que ardía y si seguia perdiendo el tiempo allí, iban a salir lastimados, pero era imposible y como pudo el otro muchacho le dijo que las llaves las tenía Isshiki. Cuando todo el grupo pasó a verlos informó que debían ir si o si a por el tipo, si no, no podrían desencadenar al chico. Se escucho el grito del gobernador y pensaron lo peor, sin más, salieron a ver y era una pelea de vaqueros, escondiéndose en cada rincón mientras gastaban balas a lo loco. A Code se le ocurrió ir por el otro lado y tomarlo desprevenido, fueron con Ada mientras que Delta apoyó a Naruto.