La llama que enciendes.

Capítulo 15: Me prendes.

Iwabee: No creí que tuvieras los huevos para entrar ahí.

Kawaki: Lo hice porque se me antojaba algo dulce.

Iwabee: Todas nos miraban raro.

Kawaki: Sí, se ve que nunca vieron a dos chicos juntos. Viven en un termo.

Iwabee: De igual forma, la única que nos sonrió fue la supervisora.

Kawaki: Ella ha sido amable conmigo desde el principio, solo que no pretendía relacionarme con nadie.

Iwabee: Se notaba.

Kawaki: Bueno... Así son las cosas.

Iwabee: *Parandose frente a él* No se porque hiciste tanto por mí ahora, pero gracias por ésta fantástica noche.

Kawaki: No es nada, tú hiciste más. Ésto no se compara.

Iwabee: No digas eso. Te dije que te quería cerca.

Kawaki: *Tomandolo de la cintura* Aunque me gustaría tener un regalo más especial.

Iwabee: *Agarrando su rostro* Me encantaría dartelo. Podemos empezar por meternos juntos en la bañera.

Kawaki: Que buena idea!

Se conectaron en un beso profundo mientras chocaban como trompos por las paredes hasta encontrar el baño. Allí abrieron la ducha y llenaron la tina adentrándose de inmediato. Aún estaban vestidos.

Iwabee: No crees que sería mejor quitarnos ésto que nos molesta *Guiñandole el ojo"

Kawaki: Es tu culpa. Me tiraste al agua sin dejarme sacar nada.

Iwabee: Aah? Disculpa?

Kawaki: Lo que escuchas idiota!

Iwabee: *Tirandole agua* A mi no me insultes zorro!

Kawaki: Será mejor que cierres el pico! *Tirándole también*

Jugueteaban un rato como dos niños sin infancia, ensuciando todo el piso y lo que estaba alrededor, pero no les importaba. Iwabee quedaba fascinado con cada sonrisa del perla gris, y a su vez, el otro se atontaba con las morisquetas del castaño. Hasta que se cansaron, se quitaron los trapos y se observaban detenidamente. El moreno se sentó sobre su novio esta vez perdiendose en sus ojos.

Iwabee: No se porque esos ojos grises tuyos me encantan.

Kawaki: *Media sonrisa* No son la gran cosa.

Iwabee: No? Estás seguro?

Kawaki: Qué tienen de especiales?

Iwabee: Su brillo, lo penetrante que pueden ser.

Kawaki: Dejate de tonterias. *Ruborizado*

Iwabee: Cómo te sientes después de todo ese trajín?

Kawaki: Bien, tranquilo. Más seguro de mi mismo y sobre todo cálido.

Iwabee: *Sonriendo* Me alegro mucho!

Kawaki: Y tú?

Iwabee: Feliz! Nadie había encendido una llama tan grande en mi corazón como tú lo has hecho.

Kawaki: Y qué te atrae de mí?

Iwabee: Creo habertelo dicho antes... Tú, eres perfecto tal y como eres. Con esa cara de mierda que traes y todo maldito asqueroso!