Just Mine (Adaptación Rivari)

Capítulo 5

Habían pasado poco más de 15 días desde que Samantha comenzó a entrenar conmigo para pasar sin percances mi primera Luna llena oficial y la verdad es que cada día que pasaba sentía que tenía más resistencia, me enseño todo o casi todo lo que se necesitaba saber para controlar bien mis sentidos y reprimir mi olor y feromonas en situaciones importantes, esto último me lo hizo practicar demasíadas veces en nuestros pequeños ratos libres.

Me enseño que puedo diferenciar a las jerarquías por el color de sus ojos, los de los alfas son rojos, de los betas amarillo y los de los omegas son azules, cosa que me sorprendio, pero más me sorprendió cuando me dijo sobre estar en celo y que incluso las mujeres alfa eran capaces tanto de embarazar a alguien como de quedar embarazadas ellas, lo mismo con los hombres Omega pero decidió que sería una charla para después ya que quería cerciorarse de que me mantuviera bajo control total o casi total dentro de 3 dias porque organizarían una ceremonia para los nuevos integrantes de la manada.

También conocí más de ella, que es mayor que yo por 3 años y sus betas son los mellizos pelirrojos, Osvaldo y Aldo, me dijo que son amigos desde la infancia y entre ellos son muy leales.
Le había preguntado sobre porque me llamaban Luna a lo cual ella me explicó amablemente que por el simple hecho de ser su mate era la forma en la cual me demostraban su respeto máximo incluso un poco más que a ella, ya que sin mi, prácticamente no habría armonía y/u orden en la manada.
Sus padres y yo entablados una buena relación luego de presentarme con ellos de la forma correcta y no como la primera vez que me moría de miedo y nervios, a pesar de ser personas consideradas, por si mismas y por terceros, peligrosas, son bastante amables hasta con la servidumbre de su hogar, nada que ver con lo que dicen en tv sobre que son desalmados y no tienen corazón y blah blah blah, lo cual no dudaba ni un poco, pero con los suyos son atentos, cosa que me agrado demasiado.

En uno de nuestros descansos ella me pregunto el porque mi papá era humano ya que era imposible que una omega encontrara un mate asi y le conte lo que él a mi, cuando cumplió 15 años encontro a su pareja predestinada sin enterarse aún que el era un animal en todo sentido, meses después lo descubrió acabando por completo con una manada pequeña, en ese mismo instante decidió cortar todo lazo con el agradeciendo que aún no la hubiese marcado y escapo hasta llegar a Minnesota donde conoció a papá y formaron una relación mucho mejor de la que tenía, el resultado de ese amor inmenso entre ellos fui yo.

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POV: Samantha

Estaba acostada con Abril en el césped cerca de un Riachuelo, ella con su cabeza en mi pecho luego de un arduo entrenamiento, creo que es justo descansar un par de días antes de su iniciación.

Había estado pensando los últimos días en hacer oficial nuestra relación, no soy de las que les gusta ser románticas pero si iba a hacer las cosas bien la llevaría a cenar y le regalaría algo no ostentoso pero que reflejára lo que siento por ella, admito que soy fría y muy callada hasta con Abril pero no creo que eso signifique que no la amo, al contrario, es la chica más linda y pura que he conocido y que cada día que pasamos juntas la adoro más, a eso sumándole su aroma tan exquisito de malvaviscos y moras azules.

-Puedo hacerte unas preguntas?-

-Claro que si cachorra, que sucede?- de pronto se sentó y seguí sus movimientos porque me intrigaba lo que diría.

-Si alguien me molestara y no se, me hiciera algo, como reaccionarias?-

-Lo mataría. ¿Por que? Alguien te hirió o algo parecido?- me levante con intención de ir a patear traseros humanos o licántropos, no me importaba quien fuera, no volverían a meterse con Mi Luna.

-No, no, nada de eso, si hay rumores sobre nosotras en el Colegio y mis amigos creen que me harías daño pero los ignoro, es solo que me estaba dando valor para hacer la siguiente pregunta- me tomó de la mano y me hizo volver a sentarme mientras yo ponía una cara de confundía porque nunca había visto o escuchado una forma tan rara de tomar valor así.

-Te escucho pequeña.-

-¿Por que llevas esa venda en los ojos? Pensaras que soy un fastidio pero la intriga a veces no me deja dormir.-

-No eres un fastidio, admito que me toma por sorpresa tu pregunta, lo he pensado bien y es verdad que mereces saberlo, más aún si serás mi esposa pero aún no, planeaba decírtelo uno o 2 días después de la ceremonia- me incline mas a ella y le di un beso corto en los labios mientras sostenía sus manos entre las mias.

-Esperare pacientemente a que llegue ese momento- tomó mi rostro y volvió a besarme pero más tiempo que el pasado, lo cual me gustaba mucho, tanto que sus labios los consideraba mi droga favorita.

La lleve a su casa antes de que anocheciera por completo, más que nada para que su papá no se preocupara y quisiera intentar matarme por secuestrar a su pequeña y única hija. Aún no nos presentabamos oficialmente pero sabía de antemano que Abril le hablaba de mi tanto como lo hacía conmigo sobre él, al principio me sorprendió un poco el como conoció a su difunta esposa pero lo entiendo.

Llegamos a su casa después de un rato.

Decidí traerla hoy en mi auto porque mi motocicleta estaba en reparacion, rodee el vehículo para abrir su puerta y ofrecerle mi mano para ayudarla a salir de el.

Antes de que pudiese alejarse la atraje hacia mi rodeando con uno de mis brazos en su cintura dejándole un par de besos el cuello, pude sentir como sonreía y se estremecia al tiempo que sus feromonas inundaban mi olfato, nos separe un poco para que pudiera estabilizarse.

-Necesito que en 2 días no hagas planes con nadie, ni con tu papá, tu y yo iremos a un lugar que me gustaría mostrarte.-

-Tendremos una cita?- me pregunto muy emocionada, casi podría jurar que en ese momento le brillaban los ojos.

-Básicamente si, entonces, ¿Qué dices Cachorra?.-

-Claro que si, pero a que hora pasarás por mi para decirle a papá y calcular cuanto tiempo tengo para arreglarme.-

-Primero iremos a cenar pero también lleva ropa y zapatos comodos extra, mañana te avisare a que hora vendré por ti.-

Me despedí de ella dándole un beso en la sien y ella abrazandome efusivamente causándome una leve sonrisa, escuche como se alejaba dejando un rastro de olor a alegría inmensa, me subí a mi coche y emprendi el camino hacia mi hogar.

Entrando a casa y cerciorándome de que la servidumbre se había retirado por completo me quité la venda y pude ver a los mellizos dormidos en posiciones muy graciosas en el sofá de la Sala de estar, no desperdicie la oportunidad y les hice fotos desde todos los ángulos posibles.

Luego me dirigí a mi habitación ya que mis padres no llegarían hasta pasado mañana en la tarde por un asunto con un soplón que mi padre apenas habia descubierto infraganti.

Me cambie de ropa y me tire en mi cama cubriendo mi cuerpo solo con las sabanas ya que hacia calor, en cuanto cerré los ojos caí en un profundo sueño.