Capítulo 11

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Lamentablemente no pudimos ir con Juan despues del desayuno ya que surgió un problema en la manada con uno de los cachorros mas pequeños, estaba jugando con sus hermanos en los alrededores hasta que no lo vieron ni captaron su aroma.

Me llamaron en cuanto paso y me pidieron ayuda para encontrarlo antes de que pasara algo.
Me dieron una de sus prendas para identificar mejor su aroma, en cuanto lo tuve ni si quiera me desvesti, solo me transforme y me fui corriendo, dado que era un cachorro no creo que haya ido muy lejos de donde estaban, eran mas fuertes que un humano promedio, pero si por mala fortuna se encontró con cazadores no tendría ninguna oportunidad, me preocupe aun más recordando que me habian dicho que era un omega asi que empecé a correr mas rápido.

Pase tanto tiempo buscando sin descansar que cuando me di cuenta ya estaba oscureciendo y comence a pensar lo peor, iba a dar media vuelta hasta que una ligera brisa llego, por unos segundos capte el aroma del pequeño lo cual me basto para saber de donde provenía.

Sabia donde estaba y la distancia suficiente para que me escucharan, aúlle dándole mi ubicacion a los mellizos para que me alcanzaran.
En cuanto llegaron a mi corrimos cerca de 5 minutos hasta que encontramos un campamento, a juzgar por las casas de campaña clculaba que había por lo menos 13 personas, mas exactamente cazadores, a mi pequeño omega logre visualizarlo atado a un arbol y temblando más de miedo que de frío, me hirvió la sengre de solo verlo, a través de nuestro link le dije que mantuviera la calma y que lo sacaría de aquí, lo bueno de esto es que no puede transformarse, de haberlo hecho seria un gran problema justo ahora.

Rodeamos el perímetro lo mas sigilosamente posible para tratar de no alertar a estos hijos de perra que si intentaban algo en su contra sin duda alguna los mataría lo más lenta y dolorosamente que pudiera, no quería usar mi bestia interior, pero si era necesario lo haría para mantenernos a salvo.

Me acerque lentamente al árbol en donde se encontraba atado y en cuanto me vio sus ojos brillaron, arranque las cadenas con el hocico, pero creo que hice mucho ruido porque comenzó un alboroto entre los invasores a mi territorio, como pude subi al pequeño a mi lomo empezando a correr.

Lo que no notamos es que tenian motocicletas, ello les facilito el perseguirnos, de pronto sentí una de mis patas arder por un segundo, habían abierto fuego contra nosotros.

Tuvimos una ventana de 30 segundos para hacer un pequeño plan, puse al pequeño en la espalda de Aldo y les indique que fueran a la cabaña mas cercana de mi papá mientras yo los alejaba, no arriesgaría a ninguno de ellos sin estar segura de que estarán bien.

Y dicho y hecho logre desviarlos a una zona que solo mis padres y yo conocemos como la palma de nuestra pata, estaba demasiado lejos de su intento de campamento y de la ciudad, los había perdido con tal de no hacer una carnicería frente al cachorro, me lleve uno que otro rozon de bala pero valió la pena.
Luego de media hora de haber corrido tratando de saber cual de las cabañas ocuparon como refugio, los encontré, por fortuna me dejaron ropa lista en la entrada para evitar cualquier situación, en cuanto entre mi vista paso directo al reloj, no me percate que habia perdido tanto la noción del tiempo.

Por ser tarde y que el cachorro ya estaba dormido decidimos partir al día siguiente para entregarlo a sus padres, con algunos rasguños y ligeros hematomas pero sano y salvo.

A mitad de la noche tuve que acostarlo conmigo ya que tuvo pesadillas, solte muy pocas feromonas para que se calmara y creo que funciono, a los pocos segundos caimos dormidos.






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Despertamos cerca de las 10 a.m., me metí a duchar para luego ir a hacer el desayuno para los 4 antes de partir.

Después de comer mande a Osvaldo a hablarle a algunos más para que le ayudaran a quitar las pertenencias de los cazadores y llevarlas a la armeria mientras Aldo y yo llevábamos al pequeño a casa.

Anduvimos a un paso regular hasta llegar a la mansión, no hubo necesidad que que abrieran, con bastante facilidad brinque una de las paredes.

Nos transformamos y vestimos antes de estar en la entrada principal donde ya nos esperaban sus padres, al vernos baje al niño de mis brazos y fue corrieño hacia ellos, me agradecieron infinidad de veces e insistiendo que me lo compensarían pero no quería nada a cambio.

Cuando se fueron el pequeño Adam, que hasta apenas me dijeron su nombre, se despidió de mi con un abrazo y pude darme cuenta que Abril se puso celosa e intentaba no parecerlo.

Me acerque a ella y la abrace por la cintura escondiendo mi rostro en su cuello inhalando su delicioso aroma.

-¿En serio te pusiste celosa de un niño?

-Celosa, ¿yo? Por favor Samantha no soy celosa, y de un niño menos

-¿A si? Entonces porque tu aroma dice lo contrario

Se quedo callada e intento zafarse de mi agarre pero no la deje, la cargue en mi hombro dirigiendonos a la sala de estar y la deje con cuidado en el sofá, le conté todo lo que había pasado y respondió lo mismo que yo había pensado de los cazadores, que eran unos hijos de perra por hacerle eso a un niño.

Pasamos el resto del dia viendo TV entre besos y cariscias metidas en el sofá y en algún punto de la tarde los mellizos se nos unieron.

Entrada la noche fui con Osvaldo a cazar para que prepararan la cena.

Justo al entrar en casa mi padre me llamo diciendome que tendría que viajar a Vancouver dentro de 2 semanas para la reunión semestral de los alfas mas importantes del mundo, tenia la esperanza de poder llevar a Ari conmigo pero me dijo que se tratarían temas que solo nosotros podiamos saber, pero tendría oportunidad de llevarla a la fiesta anual para mantener las alianzas.

Cuando se lo dije se puso triste porque volvería a estar sin verme durante una semana, al final lo termino aceptando, y acordamos que en estas 2 semanas hariamos todo lo que pudieramos para compensar un poco el tiempo perdido.

Just Mine (Adaptación Rivari)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora