✮ 18:‎ Brindar

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HUGO:

El corazón me late desbocado mientras la luz del escenario envuelve a ese chico que hace que mi mundo gire. Él camina hacia el centro con una confianza que me deja sin aliento. La guitarra cuelga elegantemente de su hombro, y sus dedos se aferran a ella con una seguridad que denota experiencia.

En la multitud se murmura expectante, pero yo solo puedo concentrarme en él. Hay un destello de nerviosismo en él que solo hace que lo encuentre más encantador. Cierro los ojos por un momento, deseando que mi corazón deje de latir tan fuerte, pero es inútil. La emoción fluye a través de mí, y sé que este momento cambiará algo en mi vida.

Justo en el momento en que abre los ojos, se sumerge en la oscuridad con una intensidad cautivadora. La primera nota resuena, y mi corazón parece detenerse por un momento. La melodía se desarrolla, y estoy atrapado en su hechizo. Observo cada movimiento de sus dedos en las cuerdas, la forma en que su cuerpo se mece al ritmo de la música.

La distancia entre nosotros parece desvanecerse mientras la magia de su interpretación nos envuelve. Siento la conexión entre él y su guitarra, como si estuvieran contándome una historia íntima. No puedo evitar sonreír al verlo cerrar los ojos, entregándose por completo a la música.

Las luces, el aroma de la madera de la guitarra y la pasión que irradia de él crean un ambiente mágico. Me pierdo en la sinfonía que crea, maravillado por la forma en que la audiencia responde con aplausos y vítores. Es como si estuviera presenciando algo más grande que la vida misma.

Cuando finaliza la canción y sostiene la guitarra en alto, mi corazón late en mi garganta. La multitud estalla en ovaciones, pero yo solo puedo admirarlo en silencio. Él ha conquistado el escenario y mi corazón al mismo tiempo. Este chico, con su guitarra y su música, ha dejado una marca imborrable en mi alma.

Hay algo raro ahí, justo en ese momento. ¿Porqué sentí tantas cosas a la vez si no ocurre nada con él? ¿Es esa duda acerca del amor la que me vuelve a inundar? ¿Acaso me siento atraído a él? la respuesta es: Sí, ese toque eléctrico jamás se va.

Mientras todos se van hacia atrás del escenario, este rodea y lo miro caminar entre todos hasta llegar a mi solo para abrazarme. El mejor abrazo que me han dado en mi vida. Fue tan sincero y puro, fue incluso más que eso. Fue inesperado más que nada, pero parece que lo estuve esperando durante toda mi vida.

La Teoría De Las ConstelacionesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora