Are you ready for it? - Minsung

Capítulo 2: La Chispa de Curiosidad

°°°Warning°°°

Este capítulo contiene escenas sexuales explícitas entre hombres, si este contenido no es de su agrado puede retirarse de este capítulo o leer el siguiente.

La noche envolvía la tranquila casa de Minho mientras él se preparaba para una fiesta a la que lo había invitado Jeongin. Estaba emocionado por pasar la noche con sus amigos y olvidarse por un momento de las tensiones en la universidad. Mientras se arreglaba frente al espejo, repasaba mentalmente la lista de personas que probablemente asistirían a la fiesta.

La puerta se abrió y Sihyeon entró en la habitación, interrumpiendo los pensamientos de Minho. —¿Te estás preparando para la fiesta de Jeongin?— preguntó con una sonrisa.

Minho asintió, ajustando su camisa —Sí, parece que será divertido. ¿Tienes planes para esta noche?

Sihyeon negó con la cabeza —No realmente. Solo planeaba quedarme en casa y leer un poco respondió con calma.

Minho la miró con preocupación —¿Estás bien? ¿Pasó algo?

Sihyeon le ofreció una sonrisa tranquilizadora —No te preocupes por mí. Pero hablando de ti, ¿estás emocionado por ver a tus amigos esta noche?

Minho asintió con entusiasmo —¡Claro que sí! Será genial pasar tiempo con ellos. ¿Tú crees que Han estará allí?

Sihyeon frunció el ceño ligeramente, recordando las múltiples confrontaciones entre Minho y Han en el campus —Es difícil decirlo. Sabes cómo es él. A veces parece que solo está interesado en pelear contigo.

Minho asintió, resignado —Sí, tienes razón. Pero quién sabe, tal vez esta noche sea diferente.

Después de terminar de arreglarse, Minho se despidió de Sihyeon y salió de su habitación, listo para la fiesta.

Mientras tanto, en otra parte de la ciudad, Han se preparaba para la misma fiesta, ajeno a la presencia de Minho en la lista de invitados. Después de una breve deliberación, decidió unirse a sus amigos y aceptar la invitación de Jeongin.

Con los dos caminos convergiendo hacia la misma fiesta, ninguno de los dos sabía que se encontrarían cara a cara esa noche, sin saber que el destino les tenía preparada una sorpresa que cambiaría el curso de su relación para siempre.

(...)

Minho llegó a la fiesta de Jeongin, donde la música retumbaba y las luces de colores parpadeaban en la oscuridad. Al entrar, fue recibido con entusiasmo por Jeongin, quien lo saludó con efusividad.

—¡Minho, estás aquí!— exclamó Jeongin, abrazándolo con entusiasmo —¡Mira qué sexy te ves esta noche!

Minho sonrió, ligeramente avergonzado por el comentario —Gracias, Jeongin. Tú también te ves genial— respondió, devolviendo el abrazo.

Jeongin le entregó un trago a Minho, instándolo a relajarse y disfrutar de la noche —Toma, esto te ayudará a entrar en ambiente— dijo con una sonrisa traviesa.

Minho aceptó el trago con gratitud y se dirigió hacia la pista de baile, dejándose llevar por la energía contagiosa de la fiesta. Mientras se movía al ritmo de la música, notó a un chico guapo que bailaba en el centro de la pista. Era Bangchan, un compañero de clase con quien Minho había tenido algunas conversaciones amistosas en el pasado.

Decidiendo acercarse, Minho se unió a Bangchan en la pista de baile —¡Hey, Bangchan! ¿Cómo estás?— saludó Minho, moviéndose al ritmo de la música.