Estaba exultante, maravillado y algo aprehensivo ante la reciente declaración de amor. Sentía que el corazón quería escapar de mi pecho, latiendo al ritmo frenético de mis emociones desbordantes. ¿Podía ser real? Me preguntaba en silencio, mientras mis manos se apartaban de las suyas como si el roce fuera a encender una chispa inextinguible en mi interior.
—¿Lo dices en serio?— susurré, con la voz temblorosa, reflejo fiel del torbellino de sentimientos que bullía en mi interior.
—Sí.— su respuesta fue un eco cálido y seguro, reflejado en la profundidad de sus ojos, oscuros como el abismo, pero brillantes de amor.
Sin poder contener la explosión de dicha y felicidad que invadía mi ser, me arrojé en un abrazo apasionado entre sus brazos fuertes, susurrando un "sí" repetidas veces como un mantra que sellaba nuestro destino.
Quizás había trascendido al plano celestial y el universo, con toda su grandeza, había decidido premiarme con el amor de Jungkook. Contemplé una vez más la obra de arte que mi amado me había regalado; era más que magnífica, era un reflejo del amor puro y sincero que él sentía por mí. Cada trazo era una caricia, cada color una promesa de eternidad. Era como si un hada hubiera posado su varita mágica sobre el lienzo, impregnándolo con la esencia misma del amor.
Nunca antes había experimentado algo así. Con Jungkook encontré el hogar que siempre anhelé, un refugio seguro donde mis miedos se desvanecían y mis sueños cobraban vida. Él me amaba con una intensidad que traspasaba los límites del tiempo y el espacio, sin importar las sombras que pudieran oscurecer nuestro camino.
Jungkook se había convertido en mi razón de ser, en mi luz en la oscuridad, en mi todo. Era mi confidente más íntimo, mi cómplice en la vida, mi amante apasionado. Cada instante a su lado era un regalo del destino, una bendición que me recordaba lo afortunado que era de tenerlo a mi lado. Y en ese momento, mientras compartíamos un romántico picnic en el parque, con los patitos nadando a nuestro alrededor y el sol poniéndose en el horizonte, supe que no necesitaba más que su amor para ser feliz por toda la eternidad.
Pero, en un mundo asfixiado por la oscuridad, donde los susurros del pasado se alzaron como fantasmas implacables y el futuro se desdibujó en un horizonte incierto, todo pareció desmoronarse sin remedio. El citatorio para Jungkook no solo fue un golpe cruel del destino, sino también una cruel advertencia de que nuestros días juntos podrían estar contados.
El terror y la confusión envolvieron a Jungkook cuando se enfrentó a las acusaciones injustas, mientras que yo me sumergí en un abismo de desesperación al recordar el doloroso cautiverio en aquel laboratorio siniestro. Cada latido de mi corazón resonaba con el eco de los recuerdos traumáticos, y mis pulmones se llenaron de un aire cargado de angustia mientras luchaba por contener el torrente de emociones que amenazaba con ahogarme.
Entre sollozos desgarradores, derramé ante Jungkook el tormento que Min Yoongi me infligió durante años. Mis palabras se entrelazaron con el llanto, mientras describía cada momento de terror y sufrimiento que había soportado en silencio. La vulnerabilidad me envolvía, pero también la necesidad desesperada de que Jungkook entendiera la gravedad de la situación.
Jungkook, con el corazón destrozado por la impotencia, me estrechó entre sus brazos, sintiendo el peso de mi dolor como si fuera suyo propio. Sus palabras de consuelo fueron un bálsamo para mi alma herida, pero también un recordatorio doloroso de la fragilidad de nuestro amor frente a las fuerzas que amenazaban con separarnos. En sus ojos oscuros brillaba una mezcla de determinación y desesperación, mientras prometía protegerme con cada fibra de su ser, sin importar las consecuencias.
Pero en medio de mi desesperación, la sombra de mi propia mentira se cernía sobre nosotros, recordándome que estaba siendo egoísta al no revelarle la verdad completa, aun amándolo con toda mi alma. El peso de mi silencio se volvía casi insoportable, pero el miedo a perderlo era aún más abrumador. En aquel momento, el amor y la angustia se entrelazaron en una danza dolorosa, mientras luchaba por encontrar la fuerza para enfrentar la verdad y mantenernos unidos en medio de la tormenta que amenazaba con separarnos para siempre.
ESTÁS LEYENDO
Lienzos de Amor y Misterio - KookMin
FanfictionEn el mágico crepúsculo de un bosque encantado, Jeon Jungkook, un apasionado estudiante de artes visuales, descubre un amor prohibido con Park Jimin, un hada cautiva de cabello rubio y ojos color miel. A medida que su relación florece entre pinceles...