Mío - Destiel

Capítulo 27

—¡Con un demonios Adam!—Dean tocaba la puerta del apartamento de su hermano con el puño desde hace aproximadamente 30 minutos—¡abre!

Unos minutos después y unos ruidos del otro lado y la puerta se abrió, Adam estaba con un pijama de estrellitas y rascándose el abdomen.

—¿Que mierda Dean?, ¿No tienes casa?, ve a joder a Sam estoy durmiendo.—se quejo el menor, haciéndose a un lado cuando su hermano lo empujo—¿Que haces aquí?

—¿Me patearon el culo y tú te la pasaste durmiendo?

—Es de noche hermano, en la noche se duerme—deja caer su cuerpo contra el mueble y siente los párpados cerrarse—¿Que te paso?

—Estoy jodido—se queja, llevándose las manos al rostro mientras se sienta frente a su hermano—Lisa hablo con Castiel, le dijo mentira tras mentira, la maldita sabía dónde atacar y ahora Cas no quiere saber nada de mi, se iba a ir de la casa, Jack hablo con John y...—Suspira—ahora Cas se quiere divorciar de mi e irse, no lo quiero perder Adam, el y los niños es lo único bueno que tengo, lo único bueno que hice...—mira a su hermano buscando apoyo y Adam está completamente dormido contra el respaldo del sofá, se arrepiente justo después de propinarle una patada para despertar cuando el dolor invade sus costillas del lado derecho.

—¿Que, que que paso?—se levanta el chico—¿Dean?, ¿Que haces aquí?, ¿Cómo entraste?—bosteza—es de mala educación entrar sin ser invitado—empieza a cerrar los ojos—sierra la puerta cuando salgas—cada vez se hunde más en el sueño.

Dean gruñe antes de girar y empezar a buscar una habitación, el departamento de Adam es un desastre hay cajones y cajas por diferentes lados, el no es exactamente el más ordenado, pero siempre trataba de dejar las cosas en su sitio, bueno castiel es el que se encargaba de todo... Castiel, no puede creer que algo tan banal como ordenar la casa se puede convertir en algo tan importante de la noche a la mañana cuando ya no lo tienes.

Suspirando sigue caminando y entra a la habitación de invitados, le sorprende que este limpia, pero no sé detiene mucho a pensar en eso, se quita la ropa y se acuesta despacio los golpes aún duelen como el infierno...

¿Cas paso por esto?

¿Cuántas veces castiel fue a la cama golpeado?

¿Cuántos heridas y moretones se tubo que cubrir?

¿Cuántas veces durmió llorando?

No puede escapar de su mente, no puede escapar de todas las atrocidades que le hizo a su marido...

Castiel siempre había Sido risueño, alegre y amable, desde que era un niño, recuerda como el chico corría por el jardín de su casa cada vez que iban de visita, cuando era niño, siempre estaba riendo, jugaba con Adam y Carl, incluso Sam se unía a sus juegos.

Recuerda una vez cuando había ido a la piscina y varios niños molestaban a castiel por su traje de baño con abejitas, debía tener unos 10 años cuando empezo con su afición por los insectos, el lo defendió, espanto a los brabucones y le dijo que su ropa era muy bonita, recuerda la sonrisa chimuela y brillante que le regaló el niño... Pero con los años el fue el causante que esa sonrisa desapareciera.

El lo lastimo.

El debe repararlo.

............

Estacionó fuera de su casa, muy temprano por la mañana, fue acercarse a la puerta y sonrió automáticamente al escuchar las voces de sus hijos y esposo, parecía que Jack no quería tomar algo y Claire solo quería reír.

Tocó suavemente la puerta, esperando ansioso a qué la abran.

—Buenos dias—saluda Cas, desaliniado y recién despierto, ama esta imagen de el—crei que estabas jugando.