Cap VII: ¿Qué es esto?

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Con su rabieta formada Dipper no halló mejor solución que abrazarlo también para ver si así le calmaba.

-Ya gruñón...deja de hacer corajes quieres- soltó con una risilla en su expresión.

-¿Acaso ya no estas molesto Pino?-

-No...creo que le he dado demasiada importancia a un detalle poco significante, y me he precipitado a inferir que tú sabías lo que hacías...lamento mi actitud tan hosca por eso-

Y de nuevo aquel vertiginoso sentimiento que le ataba a su delicada existencia, anonadado por sus ojos, como si fuera una especie de droga que le hiciera necesitar más en cada momento, sus ojos lo parecían, llenos de cariño y suspicacia.

<Se que ya no debo pensar en estas cosas...pero tengo el maldito deseo de plantar un beso en aquella hermosa estructura rosada que llama sus labios> Pensaba Bill mientras comenzaba a colocarse un par de prendas.

Cuando hubo de estar completamente cambiado volvió a mirar a su Pino, se encontraba acostado en la que era la cama de su gemela...le quedaba algo chica con sinceridad, Bill al verlo así decidió colocarlo en la cama grande, con ayuda de sus poderes llevo al chico a la otra cama donde pudo acomodarse mejor, le tapó con una pequeña cobijilla y lo dejo descansar.

<De verdad se ve hermoso al descansar...creo que debo investigar que esta cosa que siento en mi estomago>

Pasó el resto de la noche observando los libros que su Querido Pino se empeñaba a leer para aquel trabajo que tenía, eran cosas que a él con sinceridad le parecían una total absurdez, pero Dipper tenía razón, era sencillo para él por ser un demonio, conocía ya el rubio de estos temas desde el primer milenio de vida que tuvo.

~Bill~ se escuchó cual murmullo atontado.

Naturalmente el rubio viro su rostro para dar con el origen de ese ruido, pronto escucho de donde, vinieron más como ese lentamente, con un tono de voz algo sencillo y dulce, su Pino hablaba dormido.

-De verdad que Pino me sorprende- exclamó mientras se acercaba lentamente a Dipper para observar cómo se encontraba.

Lentamente los ojos del castaño se abrieron para ver a ese hombre alto y delgado mirándole con preocupación, ¿Qué hacía mirándole?

-¿Bill?-

-¿Qué sucede Pino? ¿Te encuentras bien?-

-Ah, si... ¿Por qué preguntas?- se limpió los ojos con lentitud, lo cual le parecía demasiado lindo al demonio causando un ligero sonrojo en sus mejillas.

-Pues...yo...te escuche...hablando-

Él simplemente sonrió -Oh ello...Mabel entonces no decía mentiras- se acomodó al costado de la cómoda, -Verás, yo cuando duermo puedo hablar, no lo llamaría don porque muchas personas lo hacen y no ayuda en nada, pero pensé siempre que era una broma por parte de mi hermana-

-Cierto, ¿Dónde esta estrella fugaz?- le rezongó Bill.

-Tuvo que ir, a Boston, una ciudad al otro lado de país...la verdad la extraño mucho- exclamo con pequeñas lagrimas que comenzaron a nacer de sus ojos. En ahora un acto repetido, al contrario, ahora pues fue Bill que le entregó un abrazo certero para hacerlo sentir mejor, sin siquiera entender bien todo solo se dejó llevar.

-Yo sé Pino que ella te extraña también, pero no te sientas mal vale...aquí me tienes-

<No sé que es esto que estoy sintiendo, no debí haberme convertido en humano, esta tensión en mi pecho que solo mi pino me quita, la verdad no se que deba hacer, mañana lo investigare junto a él>


"Finalmente capítulo nuevo, se que no he logrado avanzar bastante este tiempo, pero la escuela me esta matando con trabajos y no me da el tiempo...igual espero que hayan disfrutado de este capítulo, tratare de traer el siguiente lo antes posible, hasta entonces chao chao"

Amor de estudios (BilDip)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora