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Sus ojos se abrieron en el área médica de la guarida, sentía la boca seca y su cuerpo adolorido como si un gran camión de carga lo hubiera golpeado en el caparazón, su mente no estaba activo al 100 y eso generaba que viera a todas partes intentando entender que había pasado antes realmente; recuerdos fugaces de risas, golpes y ruinas se le vinieron a la mente como flashes de cámara, gruñio un poco mientras se sentaba en la camilla pero al intentar acomodarse mejor sintió un leve peso en su pecho. En su regazo el hermoso conejo blanco está descansando con una gran venda en su cabeza esto a Leo no le gusto y quiso moverlo pero al ver su cara noto que su expresión era mucho más relajada de lo que siempre mostraba, acaricio con su palma el pelaje suave de sus mejillas de forma lenta para no ser detectado, el ambiente era bastante diferente desde la primera vez que se conocieron.

– Leonardo-san? – El conejo se estaba despertando

Con cuidado la mano de Leo se alejo de el contrario dejándolo moverse más libremente, cuando el chico despertó del todo se disparo a abrazar de los hombros a la tortuga, lo tomó desprevenido y eso era obvio pero acepto el abrazo con algo de gusto.

– Estas bien!? No te duele nada?? – el conejo le reviso la cara con sumo cuidado

– Si pero que paso? Por que estoy aquí?

– Leo... te desmayaste luego de protegerme en las ruinas, pasaste dos días aquí y nadie podía despertarte!

– wow ok mucha información, uy... tu cabeza está bien? Recuerdo que me tiraste para salvarme de una gran roca

– si si, solo una contusión leve no era grave

Ambos se quedaron en silencio sin nada más que decir, el ambiente de la habitación era algo tensa y bastante fría, la tortuga suspiro para después mirarle la frente a Usagi.

– No debiste empujarme de esa forma

– Ah no? Entonces como te hubieras protegido con las dificultades que tenias antes??

– Pues quizás había usado mis odashis o algo! Pero no debiste ponerte en peligro – Se cruzó de brazos mientras daba un bufido

– Y tu no debiste usarte como escudo!

Noto que Leo se volteo para no mirarle a los ojos, Usagi enfurecido le tomo de la mejilla y le obligó a mirarle a la cara para que pudiera notar su molestia cuando Leo intento empujarlo este le tomo de las manos y lo jalo más cerca generando que se vieran frente a frente.

– Que acaso no te preocupas por ti mismo!?

– no es lo que quise decir, yo...

– CALLATE! – Soltó a la tortuga y puso una mano en su cara – Solo cállate, tu idiota...

Usagi se sostenía sus orejas apretandolas con fuerza mientras murmuraba palabras en su idioma, parecían que eran insultos hacia Leo pero por el tono de su voz y las pocas lágrimas que la tortuga alcanzó a ver decidió no interponerse, en cambio empezó a consolar a el conejo dándole palmadas en su espalda e iniciando un nuevo abrazo para poder sostenerlo; de ese modo pasaron varios minutos incluso pudieron ser unas cuantas horas pero a ninguno de los dos chicos le importaba realmente eso, lo único que querían era estar juntos y saber que al menos estaban bien, que estaban vivos. Luego de que ambos se calmaron Usagi decidió salir de la habitación para avisarle a los demás que había despertado dejando a un Leonardo pensando en todo lo que había ocurrido, esos símbolos y luces brillantes por alguna razón se le hacían tan familiares que casi se la hacía absurdo no recordar de donde venían, pronto sintió una presión en el pecho y un dolor en la cabeza está vez no fueron sus heridas o alguna jaqueca por dormir tarde si no era ese mismo sentimiento de querer recordar algo pero a la vez no haberlo vivido.

Querido "Deja Vu" {Leosagi Au!}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora