Algo contigo || Barcagamer X T/N

Parte XXIX

Diego Balsa.

Tengo mil maneras de como decirle a Sarah cuanto la quiero, pero no se como resumirlo bien, por que..

La quiero en las lineas del libro que estamos escrubiendo juntos, en cada verso.
Asi tambien como la quiero en primavera, veraño, otoño e invierno.

La quiero cuando la miro estando lejos, pero tambien la quiero cuando esta cerca.
La quiero en mis horas libres y cuando la tengo a mi lado, en las horas donde estoy ocupado.
La quiero en cada aventura, en cada sueño, en cada cita, en cada ciudad y en cada rincón que pueda haber en el mundo.

La quiero; si, pero tambien la amo.
La amo en todos mis sentidos.

Ahora mismo me encontraba viendola nadar en la psicina, yo no me queria meter; pero eso no significaria que ella no se pueda meter a nadar. Se ve hermosa, siempre se ve hermosa pero hoy... La veo más hermosa que de costumbre, aun que no suoera la vez que le pedi ser su novio, para mi ella siempre se vera hermosa, pero ese día brillaba a pesar de haber sido de noche, ella siempre brilla.
Esa es la magia de Sarah, ella brilla tanto que te lo puede llegar a contagiar, pero de igual modo no la podrias igualar; Es unica, es Sarah.

Me sorprende la cantidad de gente que dice que enamorarse es de debiles, que te pone estupido y debo admitir que lo ultimo si; pero en el buen sentido.
Aparte creo que "Debiles" no sea la palanra adecuada, es felicidad. Soy feliz cuando estoy con ella a pesar de los altibajos, siempre voy a ser feliz con Sarah; si fuera por mi me casaria con ella hasta con anillos de papel.

—Pendejo, se te cae la baba.—Bromeo Juan divertido, sentándose a mi lado— La amas, ¿no?

—Demasiado Juan y me da miedo por que es mi punto debil, tiene la ventaja de destrozarme cuando quiera, por que se que si esto se acaba el que va a terminar con el corazon roto es más probable que sea yo.

—No pienses en eso Diego, disfrutala y vive el hoy; no el mañana que para eso esta mañana, no?—Ambos nos reimos por eso.

—Amigo, creo que nunca estuviste tan enamorado—Se sumo RobertoCein en la platica, sentandose a mi lado.

—Al chile wey, yo en mi grupo de amigos a los que veo más cercanos a casarse asi como van, son a ustedes.—Comento juan mirandome.

—Hablando de eso, le quiero comprar un anillo.—Hable y se sorprendieron.

—Mames Diego, neta?

—Pos si wey, pero no de compromiso; uno de promesa, pero al chile que no se a donde llevarla, por que tenia pensado ir al restaurante donde fuimos a nuestra primera cita, pero ya fuimos tres veces ahi—Comente, nervioso.

—Llevala a un parque temático de Marvel, sabes que le llaman esas cosas.—Dio de idea Juan y por poco lo beso.

Cambiamos de conversación rapido cuando vimos que Sarah se acerco y me abrazo aun toda mojada por el agua de la psicina, yo rode los ojos.

—No te queda lo de rodar los ojos y esto es una mini-venganza por lo de hoy.—Comento sonriendo, abrazandome aun por la cintura.

—Wey si te encanta que te nalguee.—Comente en voz alta y todos se rieron, ella me jalo del brazo y como estaba cerca de la psicina –prácticamente en el borde– me tiro al agua y todos se rieron de mi, ella se tiro junto a mi.

—¿Vas a seguir?—Pregunto divertida, yo me acerque nadando hacia ella y la cargue atajandole de sus gluteos, ella rodeo sus piernas por mi cintura, dandome un beso.

—Te amo, Sarah y de verdad lo hago.—Ella me sonrio, iba a decir algo pero justo Juan salto.

—Eh cabron! Las manos fuera de sus nalgas!—Grito y todos se rieron.

—Hubieras visto los rojas que estaban anoche wey—Comente divertida y Sarah me pego despacio en el hombro, vi como sus mejillas se ruborizaban.

Escondio su cabeza en mi pecho, avergonzada.– Callate, Balsa.—Me rei levemente, acariciando su espalda.

Paso ya el tiempo y me encontraba acostado en la cama esperando a que Sarah salga de bañarse, buscando en la televisión una pelicula que mirar, cuando salio del baño con una camisa mia se tiro a la cama y me abrazo.

—Estoy exhausta.–Solto un leve suspiro, le empece a dar mimos en la cabeza y la acomode bien para acostarla en mi pecho.

—¿Queres dormir?

—Sip, pero vos queres ver una película.—Comento y apague la television dejando el control remoto en la mesita de luz que habia al lado de mi cama, la abrace por la cintura.

—Queria, si no es con vos no quiero nada.—Sonrei levemente mirandola.

—Te amo Diego, muchisimo.

—Descansa, Sarah.