㊑p s y c y o p a t h; n.g a n d j.g㊖

- THIRTEEN; glances.

- Bueno, ¿entonces ya me puedes decir?. -dije.

- ¡No! Es que me da pena. -Alice se tapó la cara mientras al momento se sonrojaba.

- ¡Rayos Dana!, ¿Por qué no?. -exclamé diciendo su segundo nombre.

Alice se hacia la difícil por no quererme decirme que le había echo con Bryan ayer por la madrugada.

Se mordió el labio y cerró los ojos sonriendo.

¡Oh mie*rda!

- ¡No te creo! ¡¿Cómo fue!? Mie*rda ¡Dios ya no eres mi niña chiquita!. -grité en susurro.

- Bueno, es que yo estaba en mi sillón leyendo el libro que la abuela me regalo en mi cumple años, ya eran las 4:30 o por ahí, solo se que tocaron mi puerta y era el pero... ¡Al momento de abrirla me besó desesperadamente!, y después me dijo que debíamos seguir con el siguiente paso y yo estaba nerviosa por que jamás sabia lo que se iba a sentir, y Dios fue demasiado caliente. -se tapó de nuevo la cara sonriendo.

- ¡Maldita pe*rra! Con detalles chica. -la miré interesada.

- Es que... ¿No haz visto los vídeos porno? Solo imagínate que somos nosotros. -se mordió el labio.

- ¡Dios mío!. -solté una gran carcajada.

Ella también río y volvió a hacer esa cara de sexo anti-virgen.

Vimos a Saori, Joyce y Lydia venir hacia nosotras.

- ¿Supieron lo de hoy?. -preguntó Lydia.

- No, ¿Qué pasa?. -preguntó Alice.

- Vendrá el chico nuevo, nosotras creemos que es el típico chico rarito o el chico codiciado y guapo. -dijo Joyce riendo.

- ¿Nosotras? ¡Hasta las mismas zorras!. -dijo Saori levantando los brazos.

Entonces recordé.

- Nash. -susurré.

- Cariño, ¿dijiste algo?. -preguntó Joyce nerviosa.

Mas bien todas estaban nerviosas.

- Ah... No. -les sonreí.

- Dijeron que vendrá en el transcurso de una clase, no lo se. -dijo Lydia.

- Saori, Lydia, ¿pueden acompañarme al baño?. -dijo Joyce entre un poco nerviosa y asustada.

- ¿Que pas... -Interrumpió Lydia.

- Solo vengan. -dijo enojada.

- Bueno chicas, nos vemos en el almuerzo. -dijo Saori.

- ¿Esta bien? ¡Pero no se vayan así como si nada!. -exclamó Alice riendo. - Están muy locas. -dijo riendo.

- Si, locas. -dije mirándolas como se iban.

- Bueno, tengo que ir a clase de... -una fuerte alarma sonó en todo el pasillo, quizá también en los demás.

- ¡Que cosa es esa!. -le grité a Alice mientras la alarma sonaba fuertemente.

- ¡No lo se, pero veo que todos están corriendo hacia el gimnasio!. -me señaló a los demás.

- ¡Entonces vamos!. -la tomé de la mano y corrimos hacia el gimnasio.

Cuando llegamos a la puerta todos estaban sentándose en las gradas, pude divisar a Saori, Lydia y Joyce al lado de Matt y los demás chicos.

Miré a Alice y caminamos hacia las gradas.

Cuando nos sentamos todos quedaron en silencio.

Lydia estaba al lado de mi así que le pregunté lo que a Alice y a mi nos mataba.