- THREE; tulipans.

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El silencio adornaba la grande sala, tan solitaria y un poco sucia.

- Bueno, a trabajar __________. -dije para después ir a la habitación que ahora seria mía.

El departamento era grande, espacioso y cómodo, es perfecto. Mi no tenía aun nada, mañana llamaría a la mudanza para ir trajera todos mis muebles y esas cosas, en la sala había un sofá a si que ahí podía dormir, una ventana daba la vista a un grande y azul mar, era un azul Pacífico y oscuro, daba miedo entrar.

Deje mi maletas en la habitación y saqué una blusa de tirantes, un short cómodo y unas sandalias, hacia demasiado calor ahí adentro, até mi cabello a una coleta.

Me metí al baño, sucio también me puse toda la ropa y salí.

Busque productos de limpieza, pero no había.

Salí de la habitación para buscar a alguien del aseo y pedirle los productos.

Mientras caminaba por los grandes pasillos me di cuenta de que mañana sería el cumpleaños de papá, mañana lo visitaré y le traeré flores, sus favoritas, tulipanes blancos.

Vi a una señora barriendo, a su lado había un carrito de limpieza, me acerqué a ella y la mire.

- Disculpa, soy nueva en el departamento y mi habitación está un poco sucia, ¿me podría prestar una escoba o lo que sea?. -dije mientras le sonreía amablemente.

- Srta... -dijo esperando mi apellido.

- Baldwin. -dije sonriendo.

- Yo iré a su habitación y la limpiaré, en unas horas, usted valla a su habitación y relájese. -dijo sonriendo y empujándome por donde vine.

- De acuerdo. -dije confundida.

- ¡Adiós Srta. Baldwin!. -dijo sonriente.

Yo solo la mire con una pequeña sonrisa y con cara de confundida.

- Loca. -susurré cuando la perdí de vista.

Iba a dar la vuela a un pasillo cuando me encuentro con un pasillo repleto de tulipanes blancos, ¿Qué mierda...?

- ¿Que..., ¿Qué demonios es esto?. -miré a mi alrededor.

Corrí rápidamente hacia donde estaba la señora para decirle pero... Ya no estaba.

- ¡Mier*da!. -corrí rápidamente de nuevo al pasillo y por arte de magia... Ya no estaban.- De acuerdo, esto me esta dando miedo. -me dije a mi misma y regresé a mi habitación.

Me tiré en el sofá y poco a poco fui cerrando los ojos.

dream:

Estaba sentada en una silla, no podía ver absolutamente nada por que tenía una venda en los ojos y en mis labios también, mis manos estaban atadas a mi espalda y mis pies estaban atados juntos.

- Hola, otra vez. -una voz ronca me estremeció.

Sentí sus manos recorrer mis piernas desnudas, solo traía un corto vestido color rojo, lo sabia por que había ido a una fiesta que me invitó Alice, mi mejor amiga pero después desperté aquí, con un loco.

- Mmm... Hueles tan bien. -dijo mientras me quitaba el cabello que tenía en mi hombros.

De pronto no aguanté más y las lagrimas salieron.

- Oh no, no llores, nunca te haría daño, jamás. -me susurró en el oído.

No se por que pero eso me había tranquilizado.

㊑p s y c y o p a t h; n.g a n d j.g㊖Donde viven las historias. Descúbrelo ahora