Epílogo

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—Aww, ¿no son ustedes dos los más lindos? —dijo Yuta, dejándose caer en el sofá y sonriéndole a Chenle y Jisung de forma realmente molesta—. Siempre supe que serían adorables juntos. 

 —Lo dije hace años —intervino Jaehee, sin levantar la vista de su teléfono.

 —Odio a tu familia —dijo Chenle desde donde estaba tendido en la alfombra, usando el regazo de Jisung como almohada.

 Apartando la vista de las cartas en su mano, Jisung le sonrió. 

 —Mentiroso.

Chenle se encontró devolviéndole la sonrisa. Está bien, tal vez estaba mintiendo, un poco. Más que un poco. Amaba a los Parks, y estaba increíblemente agradecido con ellos por permitirle pasar la Navidad con ellos y hacerlo sentir tan incluido. Siempre se había sentido cómodo con ellos, pero ahora que él y Jisung estaban juntos, todos eran incluso más cálidos con él. Chenle esperaba que no solo lo compadecieran por sus padres. Chenle no creía que Jisung le hubiera contado a su familia acerca de sus padres, pero considerando que Chenle estaba pasando la Navidad con los   Parks, probablemente todos habían adivinado qué tan mal estaban las cosas con ellos.

 La sonrisa de Chenle cayó un poco. Sus padres no habían tomado bien las noticias, por decirlo suavemente. Su madre todavía se negaba a hablar con él. Su padre... lo único que su padre había dicho era: 

 —Ni siquiera estoy sorprendido. Un hombre normal ya se habría establecido.

Chenle... esperaba sentirse absolutamente destrozado, pero en realidad estaba sorprendentemente bien. Se sentía casi aliviado, en cierto modo. Ahora que su relación con sus padres había tocado fondo, ya no tenía nada que temer. Estaba hecho. Tal vez su relación mejoraría, tal vez no, pero las cosas solo podrían mejorar ahora. Probablemente pasaría mucho tiempo hasta que las cosas mejoraran, si alguna vez lo hicieran, pero Chenle estaba sorprendentemente bien con eso. Por supuesto, era de gran ayuda que la única persona que siempre había cuidado su espalda estuviera más cerca de él que antes, tan cerca que a veces Chenle no estaba seguro de dónde terminaba él y comenzaba Jisung.

 Estar en una relación con Jisung era extrañamente nada extraño. Era jodidamente increíble. Chenle obtuvo todos los beneficios de un mejor amigo, junto con todo el gran sexo del mundo. Podía besar a Jisung en cualquier momento que quisiera, y quería besar a Jisung en todo maldito momento últimamente. Era un poco embarazoso, de verdad, pero Chenle descubrió que le encantaba besar a Chenle casi tanto como le gustaba tener la polla de Jisung en él. 

Se estaba convirtiendo en una total puta de los besos. ¿Eso era una cosa?

Chenle sonrió un poco, levantando la vista para mirar a su novio, mientras que Jisung jugaba a las cartas con sus hermanos. Jisung tenía el ceño fruncido por la intensa concentración (los Parks eran muy divertidos en lo que se refiere a juegos de cartas), por lo que Chenle podía satisfacer su vista sin ser atrapado mirando a Jisung como un bobalicón. Podía estudiar sus rasgos, expresando cada emoción que Jisung estaba sintiendo. La mandíbula de Jisung se apretó con fuerza mientras que miraba a Sungchan, que acababa de acusarlo de haber hecho trampa. Chenle se humedeció los labios, queriendo lamer el frunce en la boca de Jisung. Y besarlo. Y hacerle otras cosas. 

 —Asqueroso —dijo Jaehee con un resoplido, pateando a Chenle . 

 Chenle lo fulminó con la mirada, su cara se calentó. Si había algo que odiaba de los Parks, era la falta de privacidad. Había tantos de ellos. Uno no podía ni siquiera comerse con los ojos a su propio novio sin que se burlarande él. 

 —La fase de la luna de miel es repugnante, ¿no? —dijo Yuta, sonriendo—.Me siento avergonzado por estar cerca de esos dos.

 Jaehee puso los ojos en blanco. 

 —Como si tú y Mark no fueran igual de repugnantes. Han estado juntos por dos años. ¿Cuál es su excusa?

 Yuta se encogió de hombros antes de deslizarse descaradamente en el regazo de su marido. 

 —Mi esposo es el hombre más caliente en esta habitación —declaró, mirando las cartas de Mark—. Esa es mi excusa. 

 —Deja de distraerme, mocoso —dijo Mark, pero envolvió su brazo libre alrededor de Yuta. 

 —No estoy de acuerdo —intervino Shotaro, desde donde estaba sentado, apoyado en el hombro de Sungchan—. Mi novio es el hombre más caliente en esta habitación. 

 Chenle miró de Mark a Sungchan y arrugó la nariz pensando. Supuso que ambos eran calientes. Los Parks fueron bendecidos con unos grandes genes, de verdad. Sungchan era ridículamente guapo, pero la llamativa estructura ósea de Mark atraía más a Chenle. 

 —Creo que Mark es más caliente que Sungchan —dijo. 

 —Ouch—. Sungchan dijo, riendo. 

Yuta le sonrió a Shotaro. 

 —Me gustas. ¿Podemos quedárnoslo? 

 Jisung miró a Chenle atentamente.

 —Lo haremos. 

 Chenle se lamió los labios. Maldición, él realmente, realmente quería un beso. ¿Podría el resto de los Parks desaparecer por un minuto para que Chenle pudiera besar a su propio novio? 

 —La opinión de Chenle no cuenta —dijo Shotaro entrerisas—. Mark se parece bastante a Jisung con otro color de pelo, por lo que la opinión de Chenle no es exactamente imparcial.

 —Oye, soy extremadamente imparcial —dijo Chenle. 

 —¡No seas un mal perdedor, Taro! —dijo Yuta, sacando la lengua—. Perdiste. Chúpate esa. 

 —No me llames Taro —se quejó Shotaro, mirando a su hermanastro. 

 —No peleen, niños —dijo Taeyong, rodando los ojos—. Es Navidad. 

 Chenle se encontró sonriendo. 

 Era feliz. Era realmente, muy feliz. 

 Miró a Jisung y lo encontró mirándolo. Jisung rozó su pulgar contra los sonrientes labios de Chenle, su mirada extrañamente oscura y suave al mismo tiempo. 

 —Feliz Navidad, amor.

 —Feliz Navidad —susurró Chenle, sonriendo sin poder evitarlo.

 Y a la mierda, él estaba recibiendo ese beso, incluso si todo el clan Park los observara besarse.

Chenle agarró la parte delantera de la camisa de Jisung y loderribó. 

 —Estoy aquí. Han pasado dos horas enteras desde que me besaste. 

 Jisung se estaba riendo cuando sus labios chocaron juntos. 

 El ángulo era jodidamente incómodo, había silbidos y risas lobunas por toda la habitación, pero seguía siendo el mejor beso de la vida de Chenle. 

 Sabía a felicidad. 

 Fin

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Bueno llegamos al final de este linda historia

no olviden que  seguiré subiendo de apoco adaptaciones del mejor ship 

chenji 

Cuidense by XO

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