Capítulo 5 "Esto apenas comienza"

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Otro día más aquí..

Al menos las cosas han mejorado , ya no siento odio por todos , a veces me llego a sentir como en casa , y me culpo por eso .

Después de convencer a mi tía que me dejara ver a mis padres ya todo no era oscuridad.

Beatrix cada día cambiaba más , poco a poco sentía su bondad , su luz interior y esos tan bellos sentimientos que esconde tras esos largos y finos vestidos negros.

Me dirija hasta la mesa a desayunar . Me quedé sorprendido al ver que mi tía no estaba hoy.

Al final de la mesa se encontraba Ana con el pelo desordenado y eso ojos brillantes que no puedo dejar de mirar .

Me acerqué y le susurré—buenos días solecito—me miró y sonrió .

Sus ojos brillaban como cada mañana , cada tarde y cada noche .

Me niego a mi mismo lo que creo sentir por ella . No puedo pensar en amor debido a todo lo que está pasando en estos momentos .

—¿Ana , sabes por qué Beatrix no está?—Pregunté con cara de preocupación.

—Ni idea , salió desde temprano.

Después de oír su respuesta fui para mi
cuarto a descansar un rato ya que hoy no hay nada más que hacer y en las noches no duermo muy bien .

Al rato entró Ana.

—Beatrix ya está aquí—dijo interrumpiendo mi sueño.

Salí de mi cuarto y caminé hasta la sala había un hombre junto a mi tía , algo raro , de ojos avellana oscuro , pelo rubio y alargado .

—Les presento a Badulf , es un licántropo , último de la manada del este , los crecientes...—dijo mirando al señor

Quedé pasmado al oír eso no podía ser cierto.

—¿QUÉ?—grite confuso abriendo los ojos de manera exorbitante .No puede ser.

—¿Pasa algo?—preguntó él confundido

Me paralice por un segundo , sentí que mi corazón se encogía . Fue su maldita manada la que acabó con la vida de Kenric.

Todos los recuerdos vinieron como flashback a mi mente .

Recordé cuando jugábamos , cuando éramos una familia feliz ,recordé cada risa que compartimos , cada abrazo , cuando no estaba todo destruido . Me vino a la cabeza cada momento que pasamos juntos . El mejor compañero ,
el que me daba su apoyo incondicional, el que me cuidaba , el que me enseñaba , el que le iba tan mal en la magia . Su manada me lo quitó . Se aumentó el vacío que creía haber llenado . Volví a sentir esa ausencia con dolor como un eco que no se desvanece. Luché por combatir y enterrar esos recuerdos pero se me movió la tierra al saber que uno de ellos estaba vivo .

Es imposible , creí que mi madre se había encargado de acabar con todos esa misma noche , pensé que había matado a todos los lobos crecientes .

Ana me dio un codazo y me trajo de vuelta .

—Nada , disculpa—me disculpé tratando de no ponerlo incómodo

—¿Dónde lo conociste?—pregunté con cara de desconfianza.

—Pidió que le ayudara en algunas cosas , a cambio me hará un favor .Mientras tanto se va a alojar en nuestra casa por un corto tiempo .

Luego de nuestra charla salieron conversando .

Veo algo raro en él . A veces lo noto nervioso , creo que solo yo me doy cuenta .

Suspiro y pienso:"Es un hombre lobo , todos son raros".

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