Lifetime | Rivers y tú |

Capítulo 6: Invisible.

POV'S VALENTINA
7:21 p.m

—— ¡Chicos! —— Grité desde el comedor. —— ¡La cena! —— Un suspiro fuerte a mi lado me hizo girar. Era Samy.
—— No puedo creer que esas palabras hayan salido de tu boca. —— Sonreímos al conectar nuestras miradas. —— Te amo. —— Cada día la amaba más.
—— ¿Me estás amando mucho tú últimamente, no? —— Samy rió mordiendo su lengua.
—— Es que después de tantos años toca equilibrar. —— Fruncí mi ceño.
—— ¿Qué dices? ¿Cómo que equilibrar? ¿El qué equilibrar? —— La ataqué a preguntas rápidas. Samy sonrió de lado y otra risa tras de nosotras nos hizo saltar.
—— La goleadas que se deja hacer, a veces toca poner un portero. —— Chiara se sentó a nuestro lado. Julia y Andrew le seguían. Samy y yo reímos ante la aclaración de la ojiverde. Supuse que era lo que mi esposa quería decirme porque no la corrigió. —— Al final, Vivi no viene hoy, tuvo un lío en su curro. —— Asentí. Samy siguió masticando su comida. Reí.
—— Curro es trabajo, chiqui.
—— Ah, ahora sí entiendo. —— Confesó. —— ¿De qué trabaja o qué? —— Preguntó con un poco de cautela.
—— Es periodista. —— Vi como Julia rodó sus ojos. —— Pero independiente, tiene un vlog en internet donde hace criticas a artistas emergentes. —— Julia imitó a su hermana mientras hablaba.
—— Que sí, que la morada es una genio en la música y que le gusta criticar a todos menos a ti. —— Dijo la quinceañera. Esa interacción me hizo recordar a mi infancia con mis hermanos. Ansiaba que se conocieran.
—— Cállate. —— Dijo la mayor.

NARRADOR OMNISCIENTE
7:28 p.m

La luz tenue de la lámpara colgante creaba un ambiente cálido y acogedor. Andrew se encontraba entre Chiara y Julia, con Valentina y Samantha observándolas discutir con gracia. El aroma tentador de la comida recién preparada flotaba en el aire.

Mientras Julia picaba a su hermana mayor sobre las cosas que hacía o no hacía con su novia, Andrew estaba sumergido en su mente.

El sonido de sus risas llenaba la habitación. De vez en cuando, entre los relatos, se lanzaban bromas juguetonas que provocan risas aún más contagiosas. Andrew observaba con una mezcla de admiración y melancolía, sintiéndose como un espectador dentro de esa casa.

Desde que tiene memoria, Andrew siempre se ha sentido invisible, primero con sus padres biológicos, que a pesar de haber sido muy pequeño en aquella época, podía recordar todos esos momentos en los que se sintió apartado. Y ahora que pensaba que todo iba a ser diferente, volvía a equivocarse. Volvía a sentirse como si su voz se perdiera entre las risas y los relatos de sus hermanas. A pesar de los esfuerzos de Valentina y Samantha por incluirlo en la conversación, Andrew a menudo se encontraba luchando por encontrar su lugar.

Sus hermanas mayores siempre parecían brillar con una luz propia, destacando en diferentes áreas de la vida. Chiara, con su pasión por la música, siempre encontraba una manera de sorprender con sus creaciones, ya sea con una melodía que tarareaba mientras trabajaba en su estudio o con sus canciones creadas. Mientras tanto, Julia brillaba en el ámbito de la literatura, compartiendo sus reflexiones sobre el mundo con una elocuencia impresionante y obteniendo el reconocimiento de sus profesores, compañeros, amigos y familiares.

En comparación, Andrew se veía a sí mismo como el menos destacado, el que siempre estaba un paso atrás. Recordaba cómo sus padres biológicos elogiaban constantemente los logros de Chiara y Julia, mientras sus propias contribuciones pasaban desapercibidas. Ahora, con Valentina y Samantha, Andrew se preguntaba si su papel como el hijo adoptado contribuiría de una manera distinta a las de sus padres biológicos o si solo alimentaría más a su sensación de invisibilidad.

Sin embargo, a pesar de la aparente felicidad y comodidad que presentaban los hermanos, que se presentaba como brillos de alegría. La realidad era otra. Los tres habían pasado por muchas cosas. Al final no olvidaban la repentina muerte de su padre y la aparente negligencia de su madre con ellos.