Capítulo 9: Tormentosa Arrogancia y Millar de Cuervos:

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Aegon pov:
(5 años después del ataque de Aegon...)
Tierras de la Casa Targaryen: Mar Angosto: Rocadragón: Fortaleza de Rocadragón: Salón de la Mesa Pintada: Año 2 A.C.

Hace poco más de 5 años terminó el “Siglo Sangriento” que es como le llamaron a la guerra entre las ciudades libres desde la caída del Feudo Franco Valyrio, toda la guerra terminó cuando yo y Balerion quemamos la flota de Volantis ya que la flota secundaria tomó rumbo a las ruinas de Valyria antes de que llegáramos y jamás regresó, por otra parte la guerra en las tierras en disputa terminó con la victoria de la alianza entre Myr, Tyrosh y el Reino de las Tormentas dándole un golpe demoledor a Volantis y por si no fuera poco Braavos y los Dothraki saquearon casi toda la ciudad. Una vez terminada la guerra Braavos nos dio la cantidad acordada sin regatear y actualmente tenemos nuestro tesoro tan abarrotado de riquezas como no lo habíamos tenido desde la época de Gaemon el Glorioso.

Desde la victoria todo siguió normal hasta que cumplí 18 días de nombre que los Celtigar, Velaryon, Bar Emmon y Massey no paraban de pedir que me casase para ellos tener vía libre de matrimonio en una de mis hermanas. Yo no pensaba permitir tal cosa por lo que, después de pensarlo mucho, terminé proponiendo matrimonio tanto a Visenya como a Rhaenys. Para mi sorpresa tanto mi madre como mis hermanas no protestaron aunque pusieron algunas reglas:

•Ser igualitario y no tener favoritismo entre ellas dos aplicando esto para los hijos de ambas. [Visenya] (mi hermana mayor velando por su felicidad y la de Rhaenys)

•Que ninguno de los tres tuviera amantes. [Valaena] (mi madre previniendo problemas futuros)

•Para prevenir cualquier tipo de rivalidad en ambas que los tres permanezcamos juntos incluso en el lecho. [Rhaenys] (los fetiches de mi hermana y sus pobres excusas)

A la que menos le agradaba la idea era a Visenya pues podía considerarse una mancha en su honor y orgullo como mujer el que su esposo tomase a otra (incluso si es familia) para vivir su pasión y esté con ella solo por deber. Para resolver esas ideas erróneas tuvimos que tener muchas “charlas de hermanos” e incluso (por idea de Rhaenys) tuvimos un trío antes de lo previsto en el que ambas dejaron de ser doncellas (para mi sorpresa). Al final Visenya empezó  a ver lo bueno de esta relación y dejó su descontento inicial.

Justo unos meses antes de mi dies y nueve día del nombre mi madre y la propia Visenya prepararon la boda en la que tuvimos que comprar a un septon para que permitiera la endogamia y poligamia de nuestro matrimonio (como es de costumbre en mi familia). Cuando nos casamos fui testigo de todas y cada una de las expresiones de los señores: el heredero de los Celtigar parecía querer llorar, el viudo señor Bar Emmon (para mí sorpresa) fue comprensivo (también me dio dos o tres sermones) y el heredero de los Massey estaba estupefacto con nuestro matrimonio. También invitamos a algunos representantes de Braavos, Pentos, y el partido de los elefantes de Volantis a nuestra ceremonia, estos últimos fueron especialmente respetuosos (¿Porqué será…?).

Aunque no todo a sido tan bueno y desde el día de mi boda empecé a tener un mismo sueño atormentándome por las noches:

En una tierra fría e indómita me hallaba, un muro de hielo estaba a mis espaldas con un bosque espeso, tupido y encantado justo al frente de mis ojos. Pero no estaba solo: miré en el bosque y vi ojos azules, alcé mi vista al muro y vi cadáveres observando, miré nuevamente al bosque y de él salió un hombre de hielo: su piel era pálida y helada, su cabello fue besado por el frío y sus ojos eran zafiros brillantes. La criatura de pesadilla agarró una fina espada de hielo y con ella me atacó, cerré mis ojos y me preparé para el golpe, pero nunca llegó. Volví a abrir mis pestañas y mis pupilas vieron algo que me dejó consternado: ciervos, lobos, truchas, calamares, leones, águilas, rosas y soles lanceros peleaban contra la fría muerte y el más alto de los estandartes era uno que no había visto en mi vida: un dragón, tres cabezas, fuego y sangre, el príncipe que fue  prometido…

Juego De Tronos: El Terror NegroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora