𝐌𝐲 𝐤𝐢𝐧𝐝 𝐨𝐟 𝐰𝐨𝐦𝐚𝐧 | 𝐒𝐮𝐳𝐮𝐤𝐚. 𝐊

7.The date

| Capitulo seis.

Suzuka y Río charlaban sentadas cómodamente en la cafetería de la universidad. Suzuka jugaba con su comida mientras que Rio la miraba atentamente.

Eri no se habia aparecido desde esa noche, no habia recibido noticias de ella por parte de Koko, o las chicas. Suzuka ya estaba apunto de quitarse el anillo de compromiso imaginario a no ser por los recuerdos repetitivos de ellas y su beso en la cascada.

La pelinegra estaba deprimida, ademas que, la vida en la universidad era algo dura para Suzuka puesto que tenia pocos amigos, los profesores le exigían algo con lo que Suzuka no estaba preparada, el afrontamiento a la vida real. Suzuka en sus lienzos representaba formas y figuras que para aquel que lo viera por primera vez, seria trazos y pintura regadas al azar, "algo que no vende" a palabras del profesor Robinson.

La pelinegra poco a poco a medida que avanzaba su juventud se preguntaba si de verdad valia la pena todo ese esfuerzo y desveladas, si de verdad podia vivir de ello, si al menos podría ser lo suficientemente conocida.

Suzuka se revolvio el cabello y mostro su mejor sonrisa a Rio, ella nunca le contaba de sus problemas emocionales a no ser que sea algo que de verdad le abrume, sabia que la entenderia pero aun asi no tenia la necesidad de contarle, Suzuka cruzo sus piernas y toco levemente la mano de la contraria llamando su atención.

— Tengo algo que contarte — dijo con una sonrisa en el rostro.

Rio no se pudo contener a su sonrisa complice de oreja a oreja.— No adivino...— Suzuka iba a hablar pero ella la interrumpió — no, no me digas — quedo un rato pensando — es broma, cuéntamelo todo y con detalles.

La pelinegra soltó una carcajada antes de continuar hablando.— Bese a Eri.

Rio gritó lo suficientemente fuerte para que las miradas de los estudiantes ajenos se dirigieran a ellas.

— Perdón — se disculpo Rio tratando de esconderse en su asiento. — Prosigue, por favor.

— Ella estaba acostada y yo estaba encima de ella...

— ¿Se manosearon?

— ¡No! ¿Estas loca? — ambas rieron —. Al contrario, fue muy lindo... Eri tenia la boca suavecita, y cuando me tocaba sentía como si temblará, eran como escalofríos es que sus manos son muy frias, se me acelero el corazón bien rapido. Los hombres cuando te tocan son bruscos ¿Sabes?

— A mi me gusta que me toquen.

— A mi no, aveces duele, en cambio Eri me toca despacio y con cariño — Suzuka divagó un rato entre sus recuerdos.

Eri la hacia sentir como nadie le a hecho sentir en toda su vida. Solo Río notaba el color rojizo de sus mejillas al hablar de ella.

— Se siente diferente cuando estoy con ella ¿Sabes? Antes que me diera cuenta parece como si fuera orinado, así de mojada me dejaba la ropa interior.

— ¿Suzuka, ahora te gustan las mujeres? — pregunto Río con curiosidad.

— Las mujeres no, me gusta Eri.

Ambas rieron, Suzuka le sujetó las manos para contener la emoción, le encantaba hablar de la castaña todo el dia a todas horas, obviamente que se le guardaba en su diario para no estresar a los demas con sus pensamientos.