Matías sentía que todo había cambiado en cuestión de meses, pero sabía que era solamente él el culpable de aquéllo, asi que no se quejaba, solo veia como el tiempo que compartia con Enzo se reducía, se volvía demasiado poco incluso estando uno al lado del otro, en la casa en la que compartian desde hacía años.
Podía verlo allí, con la espalda apoyada en el respaldo del sofá, sonriendole con cierta discreción al celular mientras él usaba el suyo de forma distraída.
-voy a salir hoy-le dijo atento a su reacción
Enzo levantó la vista y sonriendo, le dijo que estaba bien; él esperaba la seguidilla de preguntas posesivas que tanto solían irritarle, pero no las hubo, parecía que a Enzo ya no le interesaba.
Se fue de casa directo a la Esteban que había estado esperándolo, pero verlo empezaba a ser aburrido, el pendejo llegó por la tarde de pésimo humor y se metió en su cama casi sin mediar palabras.
Tuvieron sexo violento, con bronca, durante una hora y luego se quedaron acostados viendo como la noche llegaba y se asomaba por las ventanas del cuarto.
-¿te tenés que ir ya?-le preguntó acostumbrado a que Matias básicamente saliera corriendo de su departamento
-me está cagando con alguien-dijo, parecía un pensamiento en voz alta más que cualquier otra cosa
Esteban encendió un cigarrillo sentándose contra el respaldo y lo miró
-no estoy seguro de que cuente como infidelidad
-¿como no? soy su novio
-estás en mi cama-le dijo sorprendido, conocía a Matias desde hacia rato, en la intimidad, y sin embargo se seguía sorprendiendo por lo hipócrita y cínico que podía llegar a ser
-¿y?
-nada, yo deberia irme a dormir ya, y considerando que no podes quedarte...
-¿me estás echando?
-tengo que dormir,Matias, la gente trabaja
Mati se vistió con bronca y se fue.
Esteban durmió en paz, cada vez soportaba menos el humor de Matias.
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Al día siguiente y mientras esperaba a sus alumnos de teatro, miraba a Francisco.
hacía semanas que ninguno parecia tener la intención de volver a verse y se preguntaba porque, sabía que Fran y Matias eran abismalmente distintos y realmente extrañaba su compañía; llegó a pensar en lo mal que había hecho al seguir enganchado de Matias cuándo allí, delante de sus ojos, tenía a una de las mejores personas que había conocido.
Con bastante tiempo por delante, se acercó hasta él y esperó que termine su clase para saludarlo; se sentía algo nervioso aunque no sabía muy bien porque.
-nunca nos volvimos a ver-le dijo mirandolo. Fran parecía tranquilo y sonriente, como siempre
-me parece que andas muy ocupado vos,no quería molestarte
-¿que pasa?
-no sé, ¿que pasa?-le preguntó él. Esteban aún le gustaba bastante, aunque no le gustaba lo que había hecho, pero ellos no eran novios por lo que no le interesaba tanto
-¿querés que hagamos algo?
Fran se planteó en ese instante si decir lo que sabía o jugar un poco con él.
y jugar siempre era más divertido.
-mañana podemos ir a plaza Italia, por la tarde
-¿plaza Italia? ¿algún lugar más lejos no había?
