Capitulo 1: Fiesta

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— Gulf solo será un rato —un chico castaño alto de buena apariencia esta abrazando las piernas de un chico sentado en una silla del pequeño comedor.

— Bright sabes que esas fiestas de niños ricos no es para nosotros.

— Lo sé y tampoco me gustan, pero Win nos invito... pues no puedo dejar pasar esta oportunidad.

— Todo sería más fácil si le dices lo que sientes —Bright se levantó y su expresión se volvió algo triste.

— Alguien como yo no tiene nada que ofrecerle, él tiene mucho dinero y yo una beca en la universidad, con un trabajo que con suerte me alcanza para pagar la mitad del arriendo.

— Amigo —Gulf se levantó y apretó cariñosamente el hombro del contrario—, bueno iremos.

— Gracias Gulf, eres el mejor —Bright le dio un abrazo y corrió a su habitación a cambiarse.

Una hora después ambos estaban fuera de una gran casa vestidos con el único traje "elegante" que tenían, Gulf iba de un azul marino con una camisa blanca que lo hacía ver como si fuera a una entrevista de trabajo y Bright con uno negro e igualmente camisa blanca.

— Chicos —un chico de tez blanca y pelo negro, de cara hermosa se acercó a ellos abriendo la reja del gran patio—, debieron decirme a qué hora vendrían para mandarles un auto.

— No era necesario Win —respondió Gulf, ya que Bright parecía estar en una nube y solo podía sonreír mirando a Win—, ya bastante hiciste con invitarnos.

— Gulf... —Win miró a Bright—... ¿qué le pasa a Bright?

— Creo que está muy feliz de verte —Win sonrió—, creo que no es el único feliz.

— Solo pasemos, estoy muy feliz de que vinieran —entraron caminando por el hermoso patio—, odio este tipo de fiestas.

— Pero es tu cumpleaños —hablo por fin Bright.

— Sí, pero suele venir solo gente hipócrita —Win era un chico muy humilde, sus padres un día ganaron un premio millonario y como su padre había estudiado economía invirtió en algunas cosas y ayudó a su esposa a poner una tienda de pasteles, la cual ya tenía 5 sucursales. Así que para los demás ellos eran los "nuevos ricos" y es por eso que no se llevaba con muchos de ellos.

— Tu casa es hermosa —dijo Bright.

— Esta no es mía, es de mis padres —entraron a un salón lleno de gente elegante y la mayoría con una copa en la mano, conversando en grupos—, prefiero mi departamento.

— Crees que podamos tomar algo —dijo Gulf.

— Oh, sí —Win le hizo señas a un camarero—, puedes traerme unas cervezas, por favor.

— Con gusto —el camarero se fue y los chicos sonrieron, por su puesto Win sabía que los tragos caros no iban con sus amigos.

— Estás hermoso —dijo de repente Bright y Win lo miró algo extraño, mientras que Gulf se reía—, yo... lo siento.

— Y eso que aun no tomas ninguna gota de alcohol —molestó Gulf.

— Gracias Bright —Win se mordió su labio inferior y se sonrojó un poco—, oh hay viene las cervezas, los tres tomaron un vaso cada uno.

— Feliz cumpleaños Win —dijo Gulf—, espero que te llegue luego un amor.

— Gulf... —Bright lo miró con enojo y Win sonrió.

— Yo también lo espero, pero creo que si sigo esperando que ese amor de un paso adelante me quedare soltero de por vida —Gulf sonrió y Bright miró a Win con una cara triste.

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