Capitulo 9: Primera Vez

112 17 1
                                    


Mew tomó a Gulf y volteó las posiciones dejando a su novio debajo de su cuerpo, se sentó sobre sus caderas y se quitó la playera que traía. Gulf se mordió su labio inferior y su temperatura subió aun más al ver el hermoso cuerpo de su novio. Mew se lanzó a besar sus labios de forma hambreada, introduciendo su lengua para jugar con la de Gulf, mientras su mano derecha se abría camino bajo los pantalones de su omega tomando su miembro duro, la mano izquierda de Mew jugaba con el pezón derecho. Todo esto hacia que Gulf se retorciera de placer.

— Mew... —dijo en medio del beso Gulf, cayendo así un poco de saliva mezclada de ambos por la comisura de sus labios—, te... dentro... ya...

— Gulf... —Mew se separo del beso y apoyo su frente con la de su omega, le hablo agitadamente—, quiero... pero... no quiero lastimarte...

— No soy virgen Mew... me queda aún día de celo... y mi ano esta dilatado, no me harás... daño... te necesito...

— No tengo... condones...

— Mew... solo...

— Me iré fuera —Gulf se sintió algo molesto—, es muy pronto amor... adoraría tener bebes tuyos, pero... —Mew acarició la mejilla de Gulf con su mano Izquierda—, es pronto aun...

— Te amo Mew...

— Y yo a ti —Mew beso sus labios suavemente y luego bajo hacia su cuello—, no habrá marcas, por más que quiera...

— Pero...

— Sin peros... luego... lo prometo... —Mew intentaba ser lo más racional posible, a pesar de que su modo alfa lo incitaba a morder y marcar a Gulf, sentía que debía ser algo que conversaran sin todos esos sentimientos de deseo y descontrol de por medio.

Beso a Gulf en el pecho, llevándose uno de sus pezones a la boca mordiendo algo fuerte, haciendo gemir fuerte a Gulf. Mew siguió dejando besos repartidos por el abdomen de su novio y bajo hasta su entrepierna bajando sus pantalones de dormir liberando su miembro.

— Amor... —Gulf lo miró—, quiero chuparlo, pero si no lo hago bien solo dime.

— Mierda Mew solo... hazlo —Gulf sentía que apenas esos labios tocaran su miembro de vendría.

— Ok... —Mew se metió el pene de Gulf a la boca y chupo cual paleta.

— Ah... Mew... oh... yo... —no podía coordinar frase alguna, su boca solo podía gemir y sus caderas se levantaban solas buscando más de ese calor abrazador que se sentía alrededor de su miembro—, yo... ahh... cerca... me... ahhh —sin poder avisar algo se vino en la boca de Mew quien trago lo que pudo, se separo de su amado y la vista de Gulf era simplemente exquisita a sus ojos.

— Mierda Gulf... ya no aguanto.

Mew levanto las piernas de Gulf dejándola en sus hombros y luego metió dos dedos dentro de su ano, el cual estaba bastante dilatado y jugoso, Gulf gimió al sentir la invasión y no pudo evitar excitarse de nuevo.

— Mew... solo mételo ya...

— Sí —Mew se posicionó entre sus piernas y de una sola estocada lo penetro por completo.

— Ah... dios... Mew... es... grande... —a Gulf le costaba respirar, pero el dolor no fue tanto.

— ¿te... lastime?

— No... ahh... estoy bien —Mew tomó el miembro de Gulf para volver a excitarlo y no costó mucho para lograrlo—, me vuelves... loco... quiero... rudo... solo...

— Yo... Gulf... lo siento... —Mew tomó las caderas de su novio y comenzó a penetrarlo fuerte y rápido, cada estocada tocaba lo profundo de Gulf haciéndolo gemir como un loco, menos mal que todo el piso era la suite de Mew o la gente estaría horrorizada con tanto gemido y grito que daba.

Mew dio vuelta a Gulf poniéndolo en cuatro y las estocadas fueron más profundas, el pene de Gulf estaba duro como una roca de nuevo, con una mano Gulf se comenzó a masturbar. Mew se inclino para besar la espalda de su novio y también dejo besos en su cuello, sus ganas de marcarlo eran muy grandes por lo que prefirió parar de besar su cuello y morderse los labios fuerte, sus manos apretaban las caderas de Gulf mientras entraba y salía, sentía que se vendría en cualquier momento.

— Gulf... ahh... dentro... caliente... quiero...

— Yo... también...

— Saldré... fuera... no puedo más... —Mew salió de Gulf, tomó su miembro para darle algunas apretadas más y se vino en las nalgas de su novio—, ahh... sí... que rico...

— Ahh... —Gulf se vino en su mano y en la cama—, Mew... ahh... grandioso...

— Te amo demasiado Gulf —Mew trato de regularizar su respiración y se acostó a un costado de su novio que estaba derrotado en la cama boca abajo.

— Fue genial...

— Sí —Mew acarició con sus dedos la espalda de Gulf y bajo hasta sus glúteos, paso su dedo índice entre las nalgas—, compraré condones mañana... quiero venirme dentro.

— Mew... —Gulf volteó su cara para mirar su novio—, ¿Por qué no me mordiste?

— Yo... quiero que sea una decisión tuya, algo que pienses con cuidado —Mew miró al techo—, no algo que sea motivado solo por tu celo.

— Pero para enlazarnos debe ser...

— Gulf —Mew tomó de las mejillas a su novio y lo vio a los ojos—, quiero que sea algo que de verdad quieras, no soportaría verte sufrir en caso de que...

— Espera... yo quiero Mew, nunca me había enamorado tanto de alguien como lo estoy de ti y quiero estar contigo pase lo que pase en el futuro.

— Yo también te amo Gulf demasiado —Mew lo abrazó y acarició con dedo la parte de atrás del cuello de su novio—, se que pueden haber días difíciles para ti después de la marca, según lo que estudie —Mew volvió a mirar a Gulf—, organicémonos para tener unos días libres y lo hacemos, ¿está bien?

— Ok —Gulf besó suave los labios de Mew—, ya no eres virgen.

— Jajaja pues no, pero me alegro haber esperado al indicado —Gulf sonrió—, vamos a dormir un rato.

— Sí —Gulf se acomodó en el pecho de Mew y este lo abrazó por la cintura.

####En otro lugar###

— Pues creo que es tiempo de que hablemos de este tema con él —le decía una mujer al hombre que estaba sentado a su lado.

— Tienes razón —el hombre llevó su copa de vino a la boca para beber un sorbo—, esto de que desaparezca por días y que salga temprano los viernes de la empresa no me gusta.

— Tampoco me gusta eso, tengo un mal presentimiento —la mujer miró una foto en la mesa—, Al fin de cuentas ya está en edad y somos sus padres, sabe que no puede desobedecer.

— Querida esposa —la mujer lo mira—, tengo el indicado desde hace mucho.

— Sabes que no te amo ¿verdad?

— Ni yo a ti.

— Pero si amo la forma en que todo lo tienes arreglado siempre —el hombre sonrió y la mujer levantó su copa para brindar.

Nuestro FinalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora