Ya no mas mi princesa, pero si mi amada.

La vieja usanza.

"Eres mi caballero, mi amado caballero quien juro protegerme" / Eres perfecta mi princesa

" ¡¿Porque me traicionas?! ¡Vuelve a mi lado! / Esta es tu decisión Luz, no quiero obligarte nada"

"(Sniff) por favor Luz . . . vuelve (Sniff) no puedo vivir sin ti . . . / Yo te seguiré hasta los confines del mundo, por ti iría de ida y vuelva".

"Es una promesa, mi caballero/"

"\ Supongo que esta vez te ayudare, no por ti si por ella, princesa."

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Dos voces desembocadas le hablaban entre susurros a la castaña, en mitad de su sueño ella los podía oír hablar de cosas que no podía entender o sacar sentido, pero eso no evitaba que algo sobre su pecho resonara.

La sensación de nostalgia abrumaba por momentos a la chica de cabellos castaños, no encontrando el porqué de esta nostalgia. "¿Quiénes son ellos?" se preguntaba por momentos, porque no puedo recordarlos. Un suspiro se escuchaba sobre la habitación, dejándola pensativa e incapaz de conciliar el sueño nuevamente, salió al pasillo de habitación.

En la distancia un brillo tenue podía verse desde su lugar, saliendo de una puerta que llamo su atención brevemente, impulsada por su propia curiosidad empezó a caminar en dirección de la puerta y deteniéndose a escasos pasos de esta.

- ¡Hola! - Dijo entre susurros, tocando a la puerta y escuchando los pasos lentos del otro lado de la puerta - Buenas noches - saludo al ver la puerta abrirse.

Al otro lado de la puerta estaba el tío de Hunter - Buenas noches, señorita Noceda - Dijo el entre risas, mientras daba un paso para salir - ¿No deberías estar dormida a estas horas?

Le cuestiono el hombre, perdiendo su sonrisa por un momento. Luz se encogió de hombros, no sabiendo como contestar a la pregunta del hombre, nuevamente escuchando su risa permear el ambiente.

- Solo no tenía sueño - respondió ella, agachando la cabeza y sintiendo como la mano del viejo hombre su posaba sobre su nuca, sacudiendo su cabello de una manera igual de nostálgica, que era como si hubiera pasado por algo así antes.

- ¿No tenías sueño? - Belos alzo una ceja, desconcertado por un instante previo a volver a su actitud más jovial de antes - Eso es ciertamente extraño y poco saludable para ti pequeña - le reprocho el con un tono similar a un regaño y burla - No crecerás si decides desvelarte así.

- Lo sé, lo sé, pero es solo que . . .. - Luz suspiro por un momento - Es solo que tengo tantas cosas en la cabeza y no puedo dormir ahora con eso en mente.

- ¿Gustas de discutir tus problemas con este viejo hombre? o tal preferirías la compañía de alguien mas afable como Eda - Belos alzo su pregunta, notando un poco la incomodidad de la chica - Eda ama a los niños, sabes y por esas cosas suele tomar bajo su ala a multitud de personas extraviadas . . . . tal deberías hablar con ella más tarde cuando despierte.

-Siii, creo que eso hare - Luz musito, notando como las manecillas del reloj parecían moverse más lento y que en consecuencia mermaban la resistencia de la chica. Un suspiro se escuchó en el pasillo cuando ella decidido hablar con Belos sobre lo que sus problemas.

Luz empezó por narrar sus sueños y las voces desembocadas en ellos, notando en todo momento como el viejo hombre estaba poniendo atención en todo momento. Un pequeño escalofrió le recorrido la espalda tras unos segundos, era difícil adivinar qué estaba pasando por la cabeza del viejo hombre quien no dejaba de sonreír en cada momento.

- ¿Pasa algo? señor Belos, no ha parpadeado en casi un minuto - La pregunto, notando como los ojos del hombre se cerraban por unos segundos tras decirle.