-Espero que mañana Velvette no me pruebe tantas cosas-. Y cerré los ojos.
Que pena que no sabe que esto apenas comienza :)
★actualmente★
Sonó la alarma que estaba en una mesita al lado de mi cama.
—Mmh... Me sigue doliendo todo el cuerpo—. Te quejaste en voz alta, apagaste la alarma que te empezaba a molestar y te levantaste.
—Bueno, oficialmente es mi primer o segundo día en el infierno—. Te aplaudiste a ti misma, sentías todas las emociones posibles menos la de felicidad.
Te fuiste a tu baño a hacer tus necesidades y después darte una ducha. Pero antes de empezar a quitarte la ropa recordaste algo que te dijo Valentino.
Flashback
—Y por cierto, ___, tendremos cámaras por todos lados viendo cada movimiento que hagas, así que, no podrás escaparte, suicidarte o cualquier cosa porque nosotros lo evitaremos a toda costa—.
Fin del flashback
Estuviste como 15 minutos mirando y buscando hasta la esquina más pequeña para ver si habían cámaras o no. También querías quitarte el collar eléctrico para no arruinarlo con el agua pero no podías, tenías que ducharte si o si así que te lo dejaste.
—Bueno, si se rompe no es mi culpa—. Dijiste sin importancia alguna.
Saliste del baño ya con tu uniforme puesto y limpió.
—Que pena, al final no se rompió el collar—. Te quejaste con un tono de tristeza en tu voz.
Estabas a punto de salir de tu habitación para empezar a trabajar, pero de la nada, empezaste a sentir una fuerte corriente por todo tu cuerpo. Era tan fuerte la corriente que te caiste boca abajo al suelo gritando de dolor.
—¡¡Aaagh!! ¡¡Qué mierda esta pasando!!—. Buscaste con tu mirada al que te pueda ayudar a sacarte el collar, el cual dejo de darte corriente unos segundos después.
Estabas jadeando del dolor, si antes te dolía el cuerpo, ahora lo sentías como si un camión enorme te acaba de atropellar. Escuchaste la puerta abrirse y viste tres siluetas que reconociste al instante, con la poca fuerza que te quedaba te giraste para ver a los Vee's con sonrisas arrogantes menos uno.
—Vaya, al parecer si funciona ese collar—. Ensanchó mucho más su sonrisa arrogante.
—Si no haces todo lo que te decimos, este será tu castigo—. Se rió burlándose de ti, después se dió la vuelta al igual que Valentino.
Ambos te dejaron sola con Vox, estabas nerviosa por lo que te podría hacer el de cabeza plana (AYUDA JAJA).
—Lamento que mis compañeros te trataron así, déjame llevarte a tu cama para que puedas descansar, trata de despertarte antes de las 2, ya sabrás porque—. Esté camino hacia ti y te agarro al estilo nupcial, te llevo a tu cama y te acostó.
—Descansa, supongo—. Se fue de la habitación.
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