Heartsteel Y Ella

El Asesino Carmesí

Los primeros rayos del sol acariciaban los tejados de la mansión. Una lujosa casa alejada de la ciudad marcaba la diferencia entre los árboles. La luz se abría paso en el hermoso paisaje y la brisa levantaba las hojas secas de los árboles. Afuera de esa casa todo parecía hermoso y tranquilo.

Para los muchachos que estaban dentro la historia era otra. Esa había sido una de las noches más duras y difíciles de sus vidas.

El primero en bajar las escaleras, como todas las mañanas antes de eso, fue Aphelios. Solía tener problemas para dormir y se levantaba con el salir del sol. Caminó por el pasillo del segundo piso y bajó las escaleras.

Una vez abajo se dirigió a la cocina sin titubear, necesitaba cafeína en su cuerpo. Para su sorpresa se encontró con una silueta alta y elegante. Yone se había levantado antes o tal vez nunca había dormido. Aquella elegante figura se encontraba apoyada en la mesada y cerca de una ventana abierta. Aphelios pudo oler el inconfundible humo que desprendía de él. Al levantar la vista no tardó en ver cómo Yone se encontraba fumando a un lado de la abertura. La helada brisa de la mañana no parecía afectarle en absoluto.

- Oh... Phel no te oí bajar...- Habló Yone para sonreír forzadamente:- Buenos días pequeño.- Aphelios frunció el ceño, no le gustaba en nada que Yone fuera así de falso con él. No tenía por qué andar fingiendo sonrisas. Ya les había dicho todo y ahora... Seguía ocultando sus sentimientos. Phel levantó la vista sobre la alacena y Yone no tardó en reaccionar:- Oh, cierto, necesitas café... Dame un momento...- Dicho esto Yone dió una larga pitada a su cigarrillo y lo dejó en el cenicero que estaba sobre la mesada. Muchas colillas apagadas estaban en él como si hubiera fumado por horas. Hecho esto Yone abrió una alacena y comenzó a rebuscar entre unos frascos:- No te preocupes aquí hay granos robustos, que tienen más cafeína. También tenemos algo más ligero...- Yone levantó los dos recipientes dándole a elegir al muchacho. Aphelios señaló el grano más robusto ya que realmente necesitaba cafeína en su sistema. Yone se dirigió a una máquina de café que Aphelios nunca antes había visto e introdujo los granos en ella. Hecho esto preguntó:- ¿Quieres un expresso? Aunque creo que es demasiado fuerte... ¿O prefieres un mocca? Oh espera... ¿Te gustaba el café Cortado verdad? Aunque hace rato no lo bebes...-

- Expresso.- Dijo Aphelios frunciendo el ceño y de muy mal humor. Sentía que Yone le estaba dando demasiada importancia y él juraba que tenían problemas más grandes que eso. No era momento para discutir temas triviales y sin sentido.

Una vez Yone configuró el aparato volvió por su cigarrillo y nuevamente comenzó a fumar. Pensativo permaneció mirando la nada por unos minutos. Aphelios se sentó en silencio en la isla. Necesitaba pensar. El sonido de la maquina de café terminando su tarea sacó a Yone de su trance. Inmediatamente fue a buscar el café y no tardó en ponerlo frente a Phel.

- Ten cuidado, está caliente...- Dijo con amabilidad. Una vez entregado el café no tardó en volver a su posición original. Era claro que Yone había sido profundamente afectado por todo lo que estaba pasando. Solía fumar mucho cuando algo le estaba pasando. Aphelios sacó de su bolsillo un pequeño anotador y escribió en él. No tardo en mostrarle la nota a Yone sin expresiones en su rostro.

"Es claro lo que se debe hacer."

-¿De què hablas Phel?- Preguntó Yone con una inocencia claramente fingida. Para Aphelios esto resultó de muy mal gusto. Era claro que Yone estaba tratando de escapar de aquel asunto. Pero no podían evitarlo. No podían vivir huyendo. Fue entonces que con el ceño fruncido y una mueca de odio en su rostro Aphelios dijo:

- Tenemos que matarlo.- Y dicho esto se cruzó de brazos.

- No, escucha... Algo se me va a ocurrir... Nosotros no podemos... Enfrentarnos a Viktor, nos destrozará...- Yone trataba de evitar aquel confrontamiento pero era inminente. Aphelios no iba a dar marcha atrás. Y en losrojizos ojos del muchacho se notaba que estaba tramando algo. Fue entonces que Yone se puso a su nivel. Dejó la preocupación de madre que realmente sentía por Aphelios y pasó a un tono más serio. Tenía que dejar de proteger a Phel como si se tratara de un niño. Yone respiró profundamente y luego habló:- Viktor es fuerte. Tiene armas que jamás hemos visto, gente dispuesta a hacer lo que sea por él y aunque acabasemos con él... Jayce no nos dejaría en paz... Ellos son como hermanos. Sabes que Jayce lleva a la policía en la ciudad y tampoco va a dejar eso impune.- Y finalmente agregó:- Además... Viktor no posee corazón... No uno real. Tiene un corazón Hextech. Dicen que Viktor es un inmortal. No puedes matar a un inmortal.-