Situaciones De Esposos - Headcanon | RadioApple • AppleRadio

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Tras muchas polémicas y rumores sobre que el Rey del infierno se está involucrando románticamente con el demonio de la Radio, Lucifer ha optado por salir a dar declaraciones oficiales en el programa de entretenimiento televisivo, el de Vox. 

Ahora mismo se encuentra sentando en un acolchado sofá, lleno de cámaras por todas partes y esperando a que den la señal de que ambos están al aire.

¡Transmitiendo!

Se escuchó de parte de una de los trabajadores, fue entonces que la música y la voz de Vox comenzó a resonar en el pequeño set.

— Muy buenas noches residentes del infierno, el día de hoy tenemos a nuestro gobernante con nosotros — Acomodó los papeles en sus manos y apuntó a Lucifer, quien saludo con una suave sonrisa a la cámara — ¡Bueno, la pregunta del millón! — Lanzó los papeles al aire y miró directamente al invitado.

Lucifer encontraba tan desagradable el aspecto del presentador, no sabía si se debía a su cabeza de televisor o porque tenía esa tensión extraña con su venado.

De cualquier forma le desagrada mucho.

— ¿Qué hace un hombre cómo el rey del infierno, gobernante de los pecadores y el ser que le dió una follada a Adán con un puto vejestorio desactualizado como Alastor? — Interrogó con una enorme sonrisa, su respuesta sería rating enorme.

Todas las cámaras estaban sobre Lucifer, pero este se había desconcentrado cuando dijeron el nombre de Alastor.

Se había acordado de su amado ¿Estará viendo o escuchando el programa? Después de todo iba a salir, quizás lo está haciendo por él, se ha de estar esforzando.

— Shh~ No lo digas tan alto — Murmuró Lucifer con una sonrisa de enamorado, Vox quedó extrañado — Él no sabes que puede tener algo mejor — Confesó sonriente, cubriendo parte de sus rostro ante el sonrojo que inundaba sus mejillas.

— Vamos a comerciales.

Todos en el infierno estaban un tanto descolocados con aquella respuesta.

¿Qué fue eso?

Desde el hotel los rostros de asombro también se había clavado.

Excepto para Alastor quien tenía sus orejitas de venado hacia abajo totalmente avergonzado por las respuesta.

— Apaga esa cosa, por favor..

Pidió cubriendo sus orejas con ambas manos y ocultando su rostro entre las rodillas, siente vergüenza y pena ajena.

Típico del amor.