Sangre Y Poder 2 (chicaxchica) ✅

Capítulo 9.

—¿Te dijo algo el gato raro ese? — preguntó Daniel.

—No, solo me confundió aún más y no me dijo nada relacionado con Dafne.

—¿En serio no te dijo nada interesante? En verdad pensé que ese gato con lo extraño que es podría decirte algo más —agregó Aurora.

—Bueno, habló de ese mundo y de un supuesto vínculo. Me dijo que estaba conectado con él de la misma forma en la que lo estaba con Dafne y con otras personas que no me quiso especificar quienes eran.

—Pero, tú también podrías ver algo a través de la mirada de ese gato. Digo, el mismo lo dijo, también está conectado contigo.

—O podrías intentar averiguar que es lo que hace él para llegar a ese otro mundo. Porque algo me dice que lo que sea que pase contigo y esa chica tiene que ver con eso.

—El gato ese me dijo que por medio de él no podría saber nada. 

Era necesario saber que era lo que estaba sucediendo, Abiggail tenía poderes que no podía controlar completamente porque estaban ligados a sus emociones y al parecer sus emociones están ligadas a ese otro mundo. 

—Entonces, ¿quién lastimó a Dafne fue su propio padre? 

Abiggail no había olvidado eso, sabía que debía hacer que el padre de Dafne pagara por ello. Su corazón quería liberar un odio que parecía contenido por años. Sin embargo, por ahora solo quería que Dafne estuviera a salvo. 

Mientras ellos tenían esa plática sobre sucesos raros, Dafne finalmente despertó. Sorpresivamente estaba bastante tranquila. Después de abrir los ojos durante algunos segundos, volvió a cerrarlos y solo cambió de posición sintiéndose bien. 

Finalmente, pudo dormir tranquila después de mucho tiempo. Tal vez era el ambiente, el aroma o ese sentimiento de protección que sentía.

—Vaya, solo necesitas su aroma.

Dafne saltó de la cama al abrir los ojos y ver muy cerca de ella un gato negro que por alguna razón podía entender.

—¿Qué diablos?

—¡Oye! Me haces sentir mal.

—¿Puedes hablar? 

—No, tú puedes entenderme.

—¿Por qué? ¿Qué demonios eres? ¿Eres la mascota de Abi?

—Sí, lo soy.

—Grandioso, ahora lo entiendo todo. Obviamente, ella no tendría una mascota normal. Bueno, ¿qué es normal en esa chica?

—Oye, cuidado de como le hablas a mi dueña... Además, ella salvó tu vida.

—Para matarme después de una forma cruel, estoy segura de que ha preparado alguna venganza para mí.

—¿Por qué aseguras eso?

—Porque le encanta vengarse.

—Entonces, ¿no has olvidado eso? Es un buen comienzo.

Dafne no entendía la actitud de Salem, quien parecía estar feliz con cada pequeño acercamiento entre Dafne y Abiggail.

Dafne no quería seguir escuchando al pequeño gato, pero aunque ella salió de la habitación, el minino la seguía.

—¡Oye! —gritó Dafne para llamar la atención de Abi —. Aleja a tu gato raro de mí.

—¿Qué gato?

Dafne miró en todas las direcciones, pero no encontró por ningún lado a Salem.

—Pero... Estaba aquí, me estaba siguiendo.