🌻Mi Hermoso Girasol🌻

Capitulo 10

Hunter despertó al sentir la cálida luz del sol entrar por una pequeña llanura que tenía su ventana, siguió la rutina, nada fuera de lo usual, y una vez listo, se dirigió a desayunar con su familia. Mientras caminaba por un largo pasillo que se encontraba repleto de retratos familiares, logró notar a detalle uno donde aparecía él jugando de niño, sin duda habían logrado plasmar la felicidad que emanaba su rostro, un aire de nostalgia lo rodeo, sin embargo, al acercarse un poco, pudo notar una pequeña rasgadura en una esquina de la pintura, se le hizo muy extraño; cuando estaba apunto de retirarlo para inspeccionarlo más de cerca, su madre lo tomó por el hombro:

- Mi niño que estás haciendo, tu padre nos espera, sabes que odia que lleguemos tarde- ella nunca lo había tomado con tanta fuerza, lo cuál lo preocupó un poco.

- Lo siento madre, solo me distraje un poco, vamos.

Nada fuera de lo común ocurrió mientras desayunaban, y en vista de que sus tutores se encontraban viajando a reinos vecinos para hacer diferentes negociaciones por orden de su padre, decidió que podría pasarse el día en el jardín real, de todas formas, no era tiempo que quisiera ocupar en alguna otra cosa.

Al ingresar noto que el ambiente era muy pesado, ya no se encontraba en un bosque con un atardecer encantador, parecía un paisaje que solo había visto en libros, era una playa de rocas, se encontraba de noche, había intentado invocar una vista así millones de veces, pero nunca lo había conseguido; por un momento, dudo en ingresar del todo. Conforme iba avanzando más y más, podía observar como el agua de mar chocaba lentamente con las piedras, el sonido era relajante y pacífico, sin embargo, el frío era demasiado fuerte, le calaba los huesos, y cada paso era una tortura; al sentir que no podía contra ese clima tan tempestuoso decidió dar la vuelta y regresar, cuando de pronto de encontró con una imagen familiar:

- ¡AAAH! ¡¿QUÉ TE PASA?! CASI ME MATAS DEL SUSTO.

- L-lo lamento su majestad no era mi intención a-asustarlo- era esa chica otra vez, Hunter no entendía como había entrado sin hacer ruido.

- ¿Qué haces aquí?, acaso, ¿tú invocaste este paisaje?

-Sí, por lo poco que sé, usted disfruta mucho de los ambientes así, y n-nadie más entra aquí, solo usted- ¿ella lo hizo? como era posible, se necesitaban años de experiencia para hacer algo así.

- ¡¿Es en serio?! pero como pudiste hacerlo, necesitarías mucha experiencia.

- Lo hago desde niña, no es tan complicado- una respuesta tan sencilla lo desconcertó aún más, que clase de sirvienta era esta.

- En fin, aún no me has dicho que haces aquí.

-Oh sí discúlpeme, su madre m-me asigno como s-su dama de compañía.

- ¿Dama de compañía? que estás diciendo, solo las princesas y reinas tienen damas de compañía, no un príncipe, además no quiero tener a alguien siguiéndome todo el tiempo.

- L-lo sé mi señor, p-pero fue el castigo que su madre m-me impuso por lo que le ocasioné a su hermano- al escuchar las palabras de la muchacha sus ira fue calmándose lentamente, su madre era muy severa al momento de imponer castigos, pero, que clase de lección era esa, en serio consideraba que su compañía era un castigo?

- Esta bien, si ella te lo ordenó, no puedo contradecirla, solo trata de estar a un par de metros de distancia, me gusta más estar solo- sin duda seria un problema tener una nueva sombra, y aunque la idea de que la chica misteriosa estaría cerca de él constantemente no le disgustaba del todo, prefería mil veces estar solo y tener la libertad de escapar al pueblo.