BABY GIRL |CHAELISA| G!P

06

—Jennie y yo somos gemelas, quizá no se note. Mis padres al principio pensaban que alguna de nosotras cambiaría el color de cabello conforme ibamos creciendo. Era raro que Jennie lo tuviera castaño y yo rubio. Nadie en la familia es rubio hasta donde sabemos. Los primeros siete años todo era normal hasta que no notaron cambios en nuestro físico.

>> Literalmente la gente cada vez preguntaba más sobre si en verdad éramos gemelas. Papá comenzó a dudar, mamá no, mamá nos había visto nacer de inicio a fin. Papá también, pero los comentarios de la sociedad lo hicieron cambiar de posición. Dudo de nosotras y para evitar tener cargos por abandono simplemente nos encerro.

>>A partir de los ocho la mayor parte del tiempo estábamos en casa, no salíamos. A los once papá no soportó seguir con el tema de vernos y notar la diferencia y la vergüenza que le causa amos así que nos encerraron en nuestra habitación.

—¿Cómo?

—Jennie era la favorita de papá porque tenía sus ojos. Le dolió bastante que de un día para otro nos hagan eso, con el tiempo nos acostumbramos. Dejamos los estudios y mamá ya no sentía remordimiento por hacer tales cosas con nosotras.

>>Fue entonces cuando hace unas semanas llegaron un grupo de hombres a la casa, al no poder salir de la habitación no sabía quiénes eran. Solo escuché la cifra con la que nos comprarían a ambas, supongo que por un momento pensé que se negarian más no lo hicieron. Llegamos y junto a otras chicas, nos golpearon salvajemente ante nuestras súplicas de dejarnos ir. Entonces luego llegó esa noche en la que nos sacaron en ropa interior frente a tanta gente.

>> Jennie no había dejado de llorar ese día, pensamos que sería nuestro último día juntas, no soporté verla así. Sin embargo, vinieron por todas nosotras y fuimos forzadas a salir.

Estaba en shock, no podía creer todo lo que habían vivido estos años. Privadas de tantas cosas desde temprana edad, sus padres eran unos bastardos.

—¿Osea que mi bebé JenJen en verdad es tu hermana? —Pregunto Jisoo a lo que rodé los ojos.

—¿Estás sorda o qué Jisoo tonta?

—Ugh siempre tan amargada

—¿Puedo ver a Jennie? —Rosé preguntó casi en súplica, miré ahora a Jisoo que se mostraba nerviosa.

—¿Qué pasa kim? Dile a Rosé que puede ir.

—Oh Oh, ¡Claro que puede! Solo que mmm ella no dejaba de llorar... Y tal vez levanté un poquito— hizo una seña con su mano— pero poquito.

—¿Qué? —La mirada de Rosé era preocupada que hasta a mí me preocupó. —Jennie es la más sensible, n-no... Ella es la que más ha sufrido.

—Dinos dónde está la chica, Jisoo.

—En mi departamento, se que fue mi culpa y no tengo perdón, no justificarse mi accionar. Por eso Roseanne, necesito tu ayuda, no me gusta verla llorar y tampoco me gusta perder mi sueño.