Things We Lost In The Fire 🔥 (LIBROS 3&4 - TO) ✔

Capítulo 7:"Broken bond"

-Todo lo que nos trajo a New Orleans, ha sido una mentira.-expuso Elijah.-Ésta historia que Sophie Deveraux se inventó, ésta lucha por el control del barrio, ésta disputa entre brujas y vampiros, no era sobre el territorio.-argumentó.-Era por Davina.-

-¿Davina?-repetí. Ese nombre ya era demasiado común en esta casa.- ¿Qué tanto tiene de especial?-

-Mucho.-aseguró.-Ocho meses antes, Sophie Deveraux y su hermana, Jane-Anne, lo perdieron todo.-explicó.-Ahora, cuatro meses después de lo ocurrido, una joven embarazada y su acompañante, se pasean por su restaurante. De pronto, toda esperanza quedó renovada. Jane- Anne, realmente sacrificó su vida, para que su hermana pudiera usarte...-señaló a Klaus.-...para encontrar a Davina. Y sí Sophie, tiene éxito en su captura, puede devolverle la vida a su sobrina.-declaró.-Pensamos que habíamos venido a librar una guerra de poder, pero esto...esto es por la familia. Y con el fin de devolverle la vida a la hija de su hermana, Deveraux va a pelear hasta la muerte.-

-¿Eso es grave?-pregunté.

-Eso la hace más peligrosa que cualquiera.-

//A la mañana siguiente//

Había dormido sumamente incomoda. Casi toda la noche permanecí en el baño; tenía arcadas y nauseas cada media hora.

Cuando el reloj de pared marcó las nueve y media, decidí levantarme. Hundiendo mis dedos a los costados de mi cadera, me puse de pie. Para esta altura, se me hacía pesado caminar el corto tramo que me separaba del baño. Apreté mis dedos un poco más, casi clavándome las uñas en la piel.

El dolor, apaga al dolor.

Con el lateral de mi cadera corrí la puerta y me sostuve del lavamanos. Suspiré encorvándome hacia adelante. Mi coronilla quedó a la altura del espejo; al estar desvelada toda la noche, mi cuerpo se amoldó erróneamente al colchón. Ahora la espalda me lo estaba reprochando.

Giré la perilla y el agua comenzó a fluir. Con mis manos, a modo de cuenco, las llené, para luego lavarme la cara. Las yemas de mis dedos acariciaron mi piel, al tiempo que me despabilaban y barrían cualquier rastro de cansancio o de sueño.

De nuevo en la habitación, recogí una camiseta holgada, con la cual reemplace la que llevaba puesta. Me cambié en silencio mientras escuchaba como mi interior iba despertando; alguien rugía por comer, lo cual sería inútil, porque terminaría devolviéndolo. Tras soltarme el cabello, lo desenredé un poco con mis dedos, para luego acomodarlo sobre mis hombros. Estaba a punto de salir de la habitación, cuando capte mi reflejo en el espejo. Elijah, anoche, mencionó que ya habían transcurrido cuatro meses desde que descubrieron mi embarazo. Verme en el espejo, con un vientre hinchado, era realmente algo nuevo y...raro al mismo tiempo. Me puse de costado para poder observarme mejor; era una bonita curva la que sobresalía de mí. Sonreí de lado. Con la punta de mis dedos trace suaves recorridos sobre la tela de mi camiseta. Por primera vez, en cuatro meses, distinguí algo que no era solamente los latidos de aquel diminuto corazón. Sentí como el aleteó de un ejabre de mariposas en mi interior. Luego, aquellos aleteos fueron reemplazados por una leve sacudida.

-Hoy estás muy despierta, cielo.-comenté. Como respuesta recibí una segunda sacudida, pero esa provenía de mi estómago, el cual clamaba por comida.

Tras asegurarme de que estaba bien, salí de la habitación. Al pasar por los aposentos de Hayley, la puerta estaba semi abierta; por lo que alcancé a ver, ella seguía durmiendo.

Me dirigí a las escaleras. Me sostuve de la baranda y comencé a descender. A medida que bajaba los escalones, los sonidos propios de la casa me recibieron. Al llegar a la sala principal, reconocí la voz de Rebekah.