La princesa de Hogwarts Sol y Luna: Sol y desierto

Me reviviste Aida

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Aida estaba muy feliz de por fin encontrarse en un sitio cálido y acogedor al que poder llamar hogar, desde que había puesto un pie en Phoenix había sido recibida con amor y alegría tanto por profesores como alumnos mientras Christopher le enseñaba cada sitio de la escuela:

-Esa es nuestra aula de Transformaciones, está dividida en 3 niveles: Básico, Medio y Avanzado. Conforme los alumnos van aprendiendo cada vez mejor suben un piso más-

-Lo sé- y aquí Christopher se sorprendió al oír a Aida- Víctor me lo mencionó una vez-

-¿Víctor?-

Aida decidió que si después de todo, Víctor como ella planeaban llegar a Phoenix revelando sus identidades, el hacer saber de su existencia al director le ayudaría a conseguir ayuda para salvarlo:

-Sí, Víctor Chaudronnoir...Profesor de Pociones de Phoenix y también de Hogwarts hace muchos años...lo conocí hace tiempo...ahora es un fantasma que ronda los pasillos de Hogwarts, gracias a él aprendí mucho sobre Pociones el tiempo que estuve allá-

-¡¿Víctor Chaudronnoir?! ¡Mi antiguo tutor de Pociones! ¡¿En serio sigue en este mundo?! ¡Pensé que no volvería a verlo! ¿Así que es un fantasma en Hogwarts? ¿Cómo es eso posible?-

-Él mismo me dijo que no pudo abandonar este mundo cuando murió al ser envenenado (él me dijo que fue un antiguo alumno de Slytherin que le tenía inquina y huyó sin pagar por lo que hizo) al hacer una promesa que lo ha encadenado a ese castillo, diciendo que solo un "alma pura y buena" lograría que su alma estuviera en paz y que por eso había permanecido bajo "un sueño profundo" todos estos años debido a que fue olvidado con el paso del tiempo hasta que una noche después que estuve un buen rato en la biblioteca y al querer regresar a mis aposentos, me perdí y fui a dar al mismo salón dónde él solía dar clases, debo admitir que al principio me asusté al verlo pero pronto nos hicimos amigos, sí, Víctor Chaudronnoir me enseñó Pociones como nadie lo había hecho y hasta fue él mismo quién me sugirió viajar hasta acá, gracias a él puede llegar hasta aquí...aunque no pudo lograrlo...ese día...él intentó salvarme de los mortífagos que nos perseguían  y que estaban bajo las órdenes de...- y en este punto Aida reprimió algunas lágrimas que a Christopher no le pasaron desapercibidas.

-¡¿Bajo las órdenes de quién Aida?! ¿¡Acaso tiene algo que ver con la forma y el estado en que te encontré allá en ese barranco?!-

-Te prometo que se lo contaré algún día director, tal vez más tarde, por ahora quiero seguir con el recorrido ¿Aquella es el aula de Encantamientos?-

-Entiendo Aida, si quieres puedes contármelo esta noche en la fiesta, algo me dice que tienes mucho dolor en el corazón por lo que te pasó y yo estoy dispuesto a sanarlo....Sí Aida y al igual que el aula de Transformaciones, esta dividida en 3 secciones Básico, Medio y Avanzado...te sorprenderá saber que aquí en Phoenix no dividimos a los alumnos por grados o años como en Hogwarts, aquí verás a alumnos de 11 hasta de 16 años o más asistiendo a las mismas clases y conviviendo entre sí, aquí se fomenta la sana convivencia y el apoyo mutuo-

-Sí, creo que Víctor me lo había dicho alguna vez, me parece sensacional-

-¿Y sabes que es lo mejor de Phoenix? Aquí no fomentamos la competencia o la rivalidad, Phoenix no tiene "casas" como Hogwarts, aquí eso de dividir a los alumnos por su personalidad se nos hace aberrante, nosotros creemos que todos los alumnos deben vivir en un ambiente donde todos trabajen en equipo, amen al prójimo sin importar sus habilidades, talentos o personalidad y sobretodo, aprendan a ser leales a la escuela a la que pertenecen, gracias a este sistema, todos nuestros alumnos salen como buenos ciudadanos con valores firmes y leales al Imperio del Sur sirviendo con amor y entrega.-