ARCO 2.4

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Un niño de rubio cabello y no más de 11 años se encontraba agachado a un lado de un cadáver.

Su mano sostenía una rama y con curiosidad picaba al zombi en descomposición, su ceño estaba fruncido y parecía sentir desagrado, pero no detuvo sus acciones

Su curiosidad por el cuerpo, que aun sin su mitad inferior y casi completamente destrozado seguía moviéndose muy erráticamente, era mucha más que su disgusto.

Otra persona, más grande, salió del edificio que estaba explorando y miró esta escena con sorpresa.

El niño se dio cuenta inmediatamente de su salida, perdió el interés en el cuerpo y soltó la rama, despreocupado.

— No te permití entrar porque es asqueroso dentro, pero aquí estas tú tocando un zombi como si nada. — El mayor suspiró y negó con la cabeza.

Choi Soobin sonrió con inocencia y se acercó para tomar la mano de Huening Kai — Sólo tenía curiosidad.

Huening Kai lo observó un momento antes de abandonar el tema y pedirle que almacenara en su espacio lo que había conseguido, el villano lo hizo sin rezongar y ambos caminaron por la ciudad.

Tomarían una caminata corta antes de regresar a su hogar.

No pudo sacarse en todo ese rato las acciones contrarias.

El villano se había acostumbrado tanto que ni siquiera le resultaba repulsivo o raro ver a cualquier cadáver a medio descomponer, como si fuera tan normal que no le quedaba más que explorarlo para saciar su curiosidad.

Esa actitud lo hizo preguntarse si el hecho de estar creciendo rodeado de zombis y sólo conviviendo con él, que también era uno, no era adecuado para su desarrollo, y si llegaría el momento donde tendría que introducir al menor en alguna base para que aprendiera a relacionarse con otros humanos.

Choi Soobin se pegó a su costado haciendo que se detuviera de golpe.

— Ya me cansé.

— Es bueno para ti caminar, aunque ya te hayas cansado.

— No puedo más — El villano de 11 años se empeñó en no dar el brazo a torcer, hasta que él se rindió primero y lo cargó en su espalda.

— Ya has crecido tanto... No, olvídalo, aun eres un niño, así que está bien.

El contrario colocó sus brazos alrededor de su cuello.

— ¿Cuándo sea mayor ya no me cargarás? — Sonó muy preocupado.

Cualquiera sentiría envidia de este niño que su única preocupación es si lo seguirían cargando cuando creciera.

— Mientras seas más pequeño que yo seguiré cargándote. — Lo pensó con detenimiento — No, incluso si creces más alto que yo, aun te cargaré.

— Sabía que responderías eso, y tú nunca me mientes, así que te creo. — Soobin entonó engreído y presuntuoso, aunque no sabía a quien le estaba presumiendo cuando sólo eran los dos en toda la ciudad, al menos los únicos con consciencia.

Al escucharlo se dio cuenta de que su plan de intentar que interactuara con otros no tendría sentido.

Haber estado con el pequeño desde sus cinco años no había hecho más que apegarlo a él.

De alguna manera sintió que estaba haciendo lo mismo que con su novio.

Nunca había intentado muy proactivamente que el otro Choi Soobin conviviera con más personas.

Siempre pensó que no había razón para obligarlo si no quería, y pensaba exactamente igual en este mundo, pero, tal vez inconscientemente estaba monopolizando a Choi Soobin por sus sentimientos románticos por el villano del mundo anterior.

MISIÓN: Cumplir los deseos del villano [SOOKAI]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora