Lizzie descubre que tiene flashbacks sobre su futuro en el que descubre que ella y todos sus nuevos amigos tienen una vida para nada buena en la que todos son personas malvadas y sin corazón.
Tendrá que tratar de ayudarlos en el pasado y descubrir e...
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☯ Narrador Omnisciente
Leroy creció en una familia convencional, había peleas y malos momentos de vez en cuando, pero se podría decir que tuvo una infancia bastante tranquila y feliz en lo que cabía. Sus padres no se llevaban del todo bien, y siempre solían demostrarlo, pero Leroy siempre trataba de ignorar las circunstancias.
Todo era aparentemente normal en su vida hasta que su madre decidió engañar a su padre con el jefe de la empresa en la que ambos trabajaban. Eso sucedió cuando Leroy tenía 14 y su hermanito 7 años. Eso fue con un balde de agua fría. No reaccionó de mala manera, tampoco de buena manera, es decir, no tenía reacción alguna, se sentía totalmente apático ante la situación. Así que sus padres creyeron que Leroy lo estaba tomando bastante bien.
Su madre se fue de la casa para vivir su aventura y al final su padre se hizo cargo de sus dos hijos.
A partir de ese momento la vida de Leroy se puso en piloto automático, tal vez alguien diría que estaba sufriendo una depresión por lo de sus padres, pero en realidad Leroy no sentía nada. No se sentía feliz ni triste.
La vida empezó a parecerle aburrida, nada lo entretenía, nada le emocionaba. Todo a su alrededor estaba en movimiento menos él mismo. Se sentía vacío.
Por eso todo el tiempo trataba de entretenerse con algo. Al principio creyó que practicar algún deporte le ayudaría, pero fue lo contrario, luego pasó a los hábitos menos sanos, como hacer apuestas y entre otras cosas ilegales, eso lo llegaba a entretener pero no del todo.
Llegó a creer que nunca nada lo haría feliz.
Aunque en el exterior Leroy no solía demostrarlo ya que siempre era muy ocurrente y le encantaba molestar a las personas con sus bromas, él solía ser muy ingenioso, sarcástico de y naturaleza humorística. Pero eso nunca le terminaba de quitar el aburrimiento.
Quería sentir eso que alguna vez sintió cuando era niño, pero miraba a su alrededor y todo parecía moverse excepto él. O tal vez los demás no se movían al ritmo de Leroy.
Aunque eso tal vez cambiaría en un futuro.
2015 19:45 P.M
Thea miró el callejón repleto de personas, en especial de hombres que murmuraban e intercambiaban dinero de todas cantidades. Al llegar ella todos la miraban, ella ya era conocida por ahí, y era una sorpresa para todos volverla a ver. Inmediatamente se puso nerviosa, bajando la cabeza con tristeza.
Alba y Charles estaban igual de nerviosos. Clark era el único que mantenía su expresión serena.
Los cuatro se fueron a un lugar más alejado de toda la multitud. Sin duda todos esos adolescentes llamaban bastante la atención. Clark era bastante respetado, por eso nadie se atrevía a molestarlos, unos pocos volteaban a ver específicamente a Alba, la hija de cierto hombre.
