Venus es la diosa romana del amor y de la fertilidad, también de la naturaleza. Ahora ella es reencarnada en una adolescente de 19 años que vive en una ciudad que parece tierra de nadie y tiene un ex novio con problemas de ira que revivió entre los...
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Cuando Venus se fue Jason quiso correr detrás de ella y poder verla para consolarla pero los Titans detuvieron su andar en cuanto lo vieron querer salir.
Dick: Jason, te necesitamos... Alukah está volviendo a secuestrar personas -supiró algo estresado-
Jason: Venus no está, ¿Qué me importa lo que haga la bruja esa? -
Dick: Que debemos salvar a las personas, el mundo está en peligro -dijo regañando a Jason una vez más-
Jason: No, el mundo de ustedes está en peligro... Mi mundo, está llorando porque este imbécil grandullón ignorante e hijo de puta la hizo sentir una mierda, solo me importa MI mundo, mi mundo es Venus y ella está mal por culpa de él -señaló a Conner- confié en que ibas a cuidarla, imbécil.
Conner: ¿Qué quieres que haga? Estaba enojado, solo... Salió decirle eso, no me controlé -suspiró con frustración-
Jason: Me importa una mierda, ahora... Iré a ver si algo de lo que rompiste puede ser reparado, si Venus cambia y vuelve a ser como antes... Juro que te mataré -habló mientras entraba al ascensor sin esperar respuesta u oposición alguna-
Sin más Jason se encaminó por todo Gotham buscando a la chica, entraba a hospitales, bares o incluso funerarias empezando a asustarse de lo que pudo suceder con la chica de cabellos verdes.
Cabe resaltar que para esto Venus no era alguien que huyera así como así, lo hizo en dos ocasiones en las que a Jason casi le daba un paro cardíaco, la primera fue cuando tuvieron una pelea por sus misiones como Robin, la encontró en el cementerio llorando al costado de la tumba de sus padres. La segunda vez, fue cuando lo encontró en el beso con Rose, él no fue participe de la búsqueda de la chica pues Grayson y los demás no dejaron que se acercara a ella, según lo que Gar le había contado la encontraron ella estaba en el teatro abandonado de Gotham leyendo Romeo y Julieta.
El cerebro de Jason fue hilando los recuerdos, Romeo y Julieta, su amor por el teatro, el teatro en donde Jason vivió, ahí fue cuando supo donde terminar su búsqueda.
A diez minutos de camino, muchos sentimientos renaciendo y la música en sus audífonos era lo único que acompañaba el camino de Jason hasta el lugar donde toda su historia empezó, el lugar donde Jason y Venus empezaron su historia juntos.
Apenas entró al lugar solo se dispuso a recitar lo que sea que se le ocurriera en aquel momento, no tenía ánimos de adornar con palabras a la chica pero si tenía ánimos de verla sonreír una vez más.
Jason: Mi amada Julieta, he sido un pésimo Romeo... He pecado ante ti, mi hermosa diosa, ¿Has de aparecer para perdonar a este vil pecador? -dijo mientras observaba todo el recinto-
Venus: ¡Buuuuh! Traigan a otro actor -bajo ella de un salto mientras reía-
Jason: Eres cruel, mi bella Julieta -dijo con una sonrisa mientras se acercaba a ella-
Venus: Pensé que ya habías notado que era cruel -sonrió ella tratando de fingir que no había estado llorando toda la tarde-
Jason: Preciosa... -susurró y sin más palabras la atrajo a su cuerpo estrechando el contrario en un abrazo-
El abrazo que Jason le proporcionaba a Venus era revitalizante, para ambos. Jason era un ser egoísta, egocéntrico, narcisista, pedante, malcriado, insolente, todo lo malo. Sin embargo, por Venus podía dejar todo eso atrás, ser el chico sensible que es siempre y amarla al punto de desnudarse en cuerpo y alma para cubrir su corazón herido de las balas de la sociedad y la vida cruel que los había puesto en esa pocilga de ciudad.
Venus sentía que volaba, que sus alas rotas eran sanadas al igual que su corazón herido, en aquellos brazos que en algún momento fueron su perdición ahora eran su salvación.
Venus: Soy un asco... -susurró llorando-
Jason: Nunca te atrevas a decir eso de nuevo -dijo tomando por las mejillas a la chica- eres mi hermosa flor, eres quien hace que el mundo tenga colores y plantas hermosas, haces de Gotham un mejor lugar... Haces de mí, un nuevo Jason que quiero que solo salga si es contigo.
Venus: Jason... Eres novio de Molly -sus ojos parecían aguarse al recordar ello, su corazón parecía volver a romperse con el simple hecho de mencionarlo-
Jason: Tu no eres Molly, no me importa en estos momentos nada... Solo quiero... Que seas feliz -suspiró- aunque no sea conmigo -aquellas palabras dolieron, dolieron como mil dagas envenenadas atravesando su corazón-
Si tan solo Jason supiera que Venus quería abalanzarse sobre sus labios y besarlo como si el mundo fuera a depender de cómo ellos dos volvían a ser uno nuevamente.
Venus: Jason... Yo... -algo la interrumpió, una explosión a las afueras del edificio-
Jason: Como pueden joder y mandar a la mierda un momento tan sublime -bromeó él aunque no fuera tan broma lo que dijo-
Venus: Vámonos, chico volteretas -dijo sonriendo-
Jason: Sigo diciendo, debes mejorar tus apodos -habló riendo mientras Venus lo cargaba empezando a volar con sus alas que parecían de un hada-
Venus: Es... -dijo suspirando- no se que es
Jason: Es Dr. Luz y el hermano sangre, ¿Qué a ese imbécil no lo mandaron al espacio?
Venus: Sea quien sea, acaba de destruir mi florería -dijo suspirando-
Jason: ¡hey perras! -gritó llamando su atención mientras reía- cariño, bomba humana
Venus: No, nada de bomba humana -reprochó ella pero este le hizo cosquillas haciendo que ella lo soltara-
Jason calló sobre el doctor luz y empezó a golpearlo en el rostro para luego empezar a dispararle al hermano sangre quien esquivaba las balas que el chico le estaba disparando.
Poéticamente se podría decir que Jason hacía ver que incluso el arma más básica pudiera ser el complemento más complejo para un combate, se movía con agilidad y sobre todo podía noquearte con tan solo un movimiento sin esfuerzo alguno o eso pensaba hasta que lo vió desmayarse al ser electrocutado por el doctor luz.
Venus: ¡Hijo de puta! -gritó enojada ahora ella llamando la atención de los presentes mientras ella aterrizaba y con sus poderes hacia que hiedras salieran del suelo empezando a actuar como látigos que azotaban y quemaban a los villanos-
Doctor luz: Maldita perra -dijo escupiendo sangre pues el látigo le dió en el rostro-
Venus: No vuelvas a meterte conmigo -dijo mientras lo tomaba por el cuello para estrellarlo contra el piso empezando a brillar de verde sus tatuajes secando así a su contrincante y succionando su energía hasta que murió-
H.S: Quien lo diría, nos encontraríamos aquí y ahora -dijo sonriendo maliciosamente-
