Capítulo 5 - The Night We Met (Lord Huron)

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"Take me back to the night we met and then I can tell myself what the hell I'm supposed to do"

[...]


Hace varios años 

Quién hubiera dicho alguna vez qué ocultar una relación era sencillo, definitivamente no sabía de qué estaba hablando.

Al principio, Atsushi sentía que todas las miradas estaban sobre él en todo momento, juzgándolo por su secreto, causándole cargo de conciencia al ocultarle algo tan importante a la agencia. Pero luego, cuando llegaba el sábado y se encontraba con el mafioso de cabello rojo, que lo saludaba con un beso que le quitaba el aliento y un "Maldita sea, extrañé tanto tus labios"... bueno, Atsushi admitía que el cargo de conciencia se iba de sabático.

Y es que se sentía como si estuviera en una especie de sueño con miel sobre hojuelas. Uno en donde la persona que quería no solo lo quería de vuelta, sino que también se lo demostraba cada vez que tenía oportunidad en el momento en que estaban los dos solos, ya fuera con bromas, conversaciones, caricias suaves o su favorito reciente: besos que le robaban el alma.

Con cada día que pasaba, Atsushi estaba cayendo más y más fuerte por Chuuya, siendo plenamente consciente de ello. Si bien era aterrador, no podía evitarlo, no cuando Chuuya parecía quererlo de vuelta con la misma intensidad; un fuego incandescente que no podía ser mentira por más que sus inseguridades engañosas le dijeran que dudara.

Poco a poco logró acostumbrarse a ocultarle a la agencia los detalles; por supuesto, supieron que veía a alguien, Atsushi era muy obvio, así que en lugar de negarlo simplemente optó por admitir que tenía pareja pero que no quería involucrarla con el trabajo puesto que podría ser de alto riesgo en ocasiones.

Logró dilatar las preguntas indiscretas y curiosas de sus compañeros sobre cómo era el individuo misterioso, describiendo rasgos generales de la personalidad de Chuuya sin entrar en detalles que lo delataran:

"Si, Es atento y caballeroso".

"Sí, me trata bien... muy bien de hecho".

"Me hace reír, además de que es detallista pero tiene... un genio algo explosivo lo cual es un poco dulce".

"Sí, me gusta, me gusta mucho y me hace feliz".

Fueron algunas de las respuestas que les dio a sus compañeros cada vez que alguno venía a cuestionarlo sobre su secreto pretendiente, que más que pretendiente era su pareja. Respuestas que parecieron tranquilizarlos y dejarlos satisfechos mientras él fuera feliz.

Especialmente a Dazai que parecía particularmente interesado en hablar y/o preguntar sobre su pareja, escudriñando a fondo de manera sutil para encontrar la verdad detrás de sus secretos. Atsushi suponía que la razón tras la curiosidad de Dazai era la preocupación, después de todo el prospecto de suicida siempre lo a cuidado de una u otra forma aún sin dejar de ser la amenaza andante que lo caracterizaba; no por nada Atsushi podía decir a boca llena que más que su simple mentor, Dazai era su amigo.

Aún así, el interés de Dazai mantuvo a Atsushi alerta casi todo el tiempo de no cometer ningún error en su historia o dejar algún punto flaco para que pudiera descubrirlo, aún si sabía que ocultarle algo era casi imposible (casi era la palabra clave aquí).

Fue extremadamente cuidadoso con lo que decía junto a Dazai, y por supuesto eso incluye a Ranpo también. Porque ambos podrían pillar la mentira con un mínimo adjetivo o comentario en el que dijera demasiado sobre Chuuya.

Creía que en general lo había sobrellevado bien, pues luego de un par de meses, la novedad de que tuviera pareja en la agencia se calmó y las preguntas indiscretas cesaron, con todos aceptando su nuevo estado que pasó de soltería a "en una relación" y respetando no indagar más allá.

The one that got away (Chuuatsu - Dazatsu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora