- Te di mi tiempo, mi apoyo, mi amor... y lo único que recibí de ti fue odio y rechazo. No esperes te acepte ahora-
Esas palabras tan frías saliendo de sus labios llegaron a mi corazón como dagas. Tenía esperanzas de que aún sintiera lo mismo de hac...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
________ se fue.
Ese era el unico pensamiento que rondaba en mi cabeza.
Toda oportunidad que pude haber tenido ya no existiría más. Ya no podría decirle cuanto lo sentía, cuanto me arrepentía por haberla lastimado con mis palabras y acciones.
—Félix, cariño... sé que es algo repentino, pero aun puedes-
—No — interrumpí a mi madre— ya no tiene caso que intente hacer algo todavía.
—Pero-
— Olvídalo mamá, lo más probable es que el hecho de que ________ se haya ido sea en parte mi culpa. Ya no tengo porque seguir con mi intento de disculpa— si ________ ya no estaba, ¿Qué caso tenía intentar algo que ya no era posible?
—Félix, no seas tan duro contigo mismo.
—¿¡Quieres dejar de insistir?!— de un momento a otro estaba molesto. No con mamá, no con la niña de ojos esmeralda. Sino conmigo.
—Félix...— era claro que estaba sorprendida. Nunca le había alzado la vos a mi maarruiné
— ¡Lo arruine! ¡Pude haberlo arreglado!— grité. Me sentía tan impotente en ese momento— ¡tuve tantas oportunidades, pero solamente fui un cobarde!
El silencio inundó la habitación. Traté de calmar mi temperamento para no volver a gritarle a mamá. Ella no tenía la culpa como para que yo le alzara la voz.
— No iré al instituto— dije mientras daba media vuelta de regreso a mi habitación.
Mamá no dijo nada. No sabía si era porque no sabía que más decirme o porque estaba enojada conmigo por gritarle.
El día apenas comenzaba y yo sentía que toda se estaba acabando.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Falté toda esa semana al instituto.
No tenía ganas de nada. Lo único que pedía era verla otra vez.
Mamá decidió darme mi espacio. Solamente llegaba a mi habitación a dejarme los tiempos correspondientes de comida, pero yo a penas los tocaba.
Estuve siente días tirado en la cama con un único pensamiento.
Ella se fue por mi culpa.
Era más que obvio.
Podría tomar un avión e ir directamente a ella, pero no tendría caso. Si lo hiciera, y teniendo fe en que el mundo no me odie tanto y me ayude a encontrarla, ¿con que cara la vería?
El recuerdo de su conversión con Adrien no ayudaba.
—Además, esto talvez me ayude a olvidarme de él—
No necesitaba más pruebas para saber que ________ se había por marchado por mi culpa.
El culpable de mi sufrimiento no era nadie más que yo.
Ella buscaba olvidarse de mí. Lo mejor era hacer lo mismo. Ya no buscaría meterme en su vida. Ya no quería hacerla sufrir más.
Ella merecía ser feliz, incluso si eso significaba alejarse de mi.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
