junio, 1997 -Parte 1-

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Madre: desconocida

"Mother: unknown"

De HufflepuffMommy

Alfa-Bet-eado

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junio, 1997 -Parte 1-

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El cumpleaños de Draco se acercaba y Hermione estaba preocupada por qué regalarle.

Había sido más fácil elegir su regalo de Navidad, ya que era sólo un regalo entre amigos, pero ahora eran algo y ella no tenía idea de qué obsequiarle.

Buscó a Daphne, sintiéndose culpable una vez más por haber estado descuidando a su amiga. Daphne descartó sus preocupaciones una vez que las dos se encontraron en la biblioteca una tarde, dentro de una burbuja de privacidad para mantener alejados a cualquier espía.

—No te preocupes por eso —aseguró Daphne—. De todos modos, he estado ocupada con Terry la mayor parte del tiempo, si sabes a qué me refiero... —Ella movió las cejas para darle mayor énfasis.

Hermione se sonrojó y miró hacia otro lado.

—En realidad, sí, sé lo que quieres decir.

Daphne jadeó.

—¿Qué? ¿En serio? ¡Cuéntamelo todo!

Hermione se rio entre dientes, emocionada de poder compartir su relación con alguien.

Las dos hablaron sobre sus novios, aunque Hermione se sintió rara al llamar a Draco su «novio» ya que nunca usaban etiquetas, y después de una hora, finalmente le planteó su pregunta a Daphne.

—¿Entonces qué sugieres? —preguntó nerviosamente.

—Podrías conseguirle un libro —sugirió Daphne.

—Ni siquiera sabría por dónde empezar con eso, parece que tiene una biblioteca entera —refunfuñó.

—Bueno, ¿qué tal algo para cuando juegue Quidditch?

—Pensé en eso, pero no ha jugado en todo el año, así que creo que comprarle algo para eso no tiene sentido —dijo Hermione mientras apoyaba la barbilla en su puño.

—¿Una mamada?

Hermione se sonrojó y luego murmuró:

—Ya estaba planeando eso.

—Bueno, ¿qué más le gusta? —preguntó Daphne.

—Eres su amiga, por eso acudo a ti —señaló Hermione.

—Sí, es cierto, pero probablemente lo conozcas mejor que yo en este momento —dijo con un guiño.

Hermione reflexionó por un momento.

—Bueno, además del Quidditch, le gusta la ropa y los zapatos de alta gama, pero no quiero comprarle ropa. Le gusta el chocolate...

—¡Oh! —exclamó de repente Daphne—. ¿Qué tal si le regalamos algunos chocolates muggles?

Hermione sonrió.

—¡Es una buena idea! Puedo conseguirle una variedad de cosas para que los pruebe.

—¡Le encantará! —asintió Daphne—. Te digo que a los magos les gustan los dulces.

Hermione se rio.

Madre: desconocida *Traducción*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora