N, Uzi y Evelyn estaban como en una junta de amigos. El único chico no estaba acostumbrado a esto si no era con las dos albinas, no quería remplazarlas. Era muy raro para él pues estaba con la que le gustaba y con su mejor amiga que se cruzaron casualmente por allí.
Ya se iban conociendo mejor y los gustos del otro, como si de un grupo de tres niños pequeños se conociera hace menos de diez minutos en un parque de juegos.
Como entraron los tres a las siete, las dos chicas no solían estar por ahí a esas horas por lo que se encontraban nerviosas por ver el lugar tan vacío, era pacífico de todos modos.
N tenía miles de temas de los cuales hablar así no muere la conversación de los tres. Habló sobre sus dos amadas amigas que ahora mismo esperaban sin importarles mucho cuánto se atrasara el mismo.
— Uuh, ¿podemos conocerlas?
Uzi tendría las manos totalmente cálidas al entrelazarlas entre sí, pareciendo que rogaba por conocer a gente nueva y forzarse a ser más sociable. En cambio, la mirada de N se suavizó a una de ternura por verla interpretar a una niña pequeña.
— Sí —afirma con una bonita sonrisa—. Vamos a mi salón, ¿quieren? A estas horas deben haber menos de cinco alumnos dentro, o eso creo.
La cara de Evelyn parecía indiferente ante su propuesta. Obviamente ya conocía a las dos amigas del peliblanco, no tocó más que actuar como si no las conociera. Por suerte, sabe hacerlo a la perfección.
Algo que Uzi no notaría era que debido a la pigmentación de la piel de N se notaba un rubor proveniente de sus mejillas, la bestie de ella sí lo notó perfectamente y lo quiso hacer notar para ponerlo nervioso.
— N, como que estás medio rojo. ¿Te enfermaste? —habla en un tono algo pícaro tratando de no soltar una risa por accidente.
Captó la atención de la menor de los tres, volteando sus ojos púrpura hacia el que supuestamente se había enfermado por las teorías de Evelyn. No logró verlo porque chilló al tratar de no ser visto por su crush.
— ¡No! Es que... es algo que me dicen muchos porque pasa seguido —era pésimo cómo ocultaba, pero de alguna manera Uzi le creyó—. Un poco obvio por el color de piel.
La de cabello color amatista ignoró el hecho por el temor de incomodarlo, mas esta ya no le daba importancia a eso. Supuso que era un problema de él solo por ser albino.
— Jaja, está bien N —un pequeño gesto formó para indicarle que no importaba en lo absoluto.
Por otro lado se quedó más tranquilo así no sabían su oscuro secreto que para la rubia de aquellos tres no era tan oscuro.
Los tres llegaron a dicho salón, encontrandose con J, V y unos dos alumnos más que estaban sentados con la mente en blanco.
— Hola, chicas —él dejó las cosas en su escritorio que estaba delante del de la de dos coletas.
Uzi y Evelyn entraron felices, no les correspondía el salón que debían entrar pero era una hora libre y el profesor no había llegado todavía, así que todo bien por ahora.
— Hola N, ¿quiénes son tus dos amigas? —apuntando inclinando su cabeza hacia las dos «desconocidas» si se les puede llamar así.
— Son Evelyn y Uzi —N demostraba algo de nervios por el facto de tener a su enamorada secreta cerca.
— ¡Un gusto, Evelyn y Uzi! —voltea a darles un apretón de manos.
El grupo de cinco jóvenes al parecer les gustó cada uno y se agradaron uno al otro. Pasaron más de diez minutos en un aula que no les correspondía estar, pero se divirtieron mucho hasta que faltaba poco para iniciar las clases. J propuso salir todos juntos algún día lo cual a eso no se negaron, era tentador.
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𝘊𝘰𝘮𝘪𝘤 𝘴𝘵𝘰𝘳𝘦 [HIATUS]
RomansaN, siempre es él quien se cruza con Uzi. Él está enamorado, ella apenas sabía de su existencia. ¿Cómo iba a enamorarse de alguien que apenas vio pasar? El esfuerzo en hacer que alguien se fije en ti es imparable, o al menos para alguien que se choca...