Creo Que Me Gustas

Track 13

—No lo sé —Responde tranquilo— Pero lo que sea que estés pensando, no lo hagas, por favor.

—Idiota —Dice Dominic enojado.

Veo como Dominic quiere empujar el pastel hacia Sven para mancharlo, pero él se levanta rápido, toma el brazo del chico y lo lleva hacia la espalda para hacer una especie de llave, lo inmoviliza y pone el pecho de Dominic en la mesa sin darle la oportunidad de hacer algo, los pasteles caen al suelo mientras escucho quejidos de dolor y me levanto de inmediato al ver la escena.

—Si vuelves a decirle algo hiriente a Allen o a cualquier otra persona voy a volver, y el brazo solo te va a servir de adorno —Empuja el brazo aprisionado más arriba haciendo que se queje más— Ahora pídele perdón.

—Perdón —Dice Dominic casi gritando y con la cara de dolor— Perdón Allen, no lo volveré a hacer.

Sven con su otra mano toma el cabello de Dominic, levanta su cabeza un poco y la estrella contra la mesa.

Es raro, pero en medio de toda la escena pienso en que un chico que todo el rato es muy tranquilo, sereno y sobre todo encantador y caballeroso, acaba de derrotar a otro chico mucho más grande y fuerte que él.

Ahora lo veo diferente... No sé como describirlo... Creo que...

—Ahora vete de aquí —Dice Sven mientras levanta a Dominic y lo empuja hacia la salida mientras sienta su brazo.

Dominic no dice nada, se toma el brazo adolorido y se marcha en silencio. Por suerte no había nadie en el lugar.

—Lo siento —Dice Sven mientras se sacude la ropa, toma la servilleta del suelo y recoge los pasteles que cayeron al suelo y lo tira a la basura— Te compraré otro pastel y... —Mete su mano en el bolsillo de su pantalón.

—No es necesario —Respondo mientras siento una especie de cosquilleo en el estómago y algo de nerviosismo— Muchas gracias por defenderme —Sonrío un poco y lo miro— Eres un baúl de sorpresas.

—Que pena —Agacha la mirada y se sonroja un poco— No debí hacer eso, lo siento.

—No, está bien, me gustó, me e... —Sonrío más por alguna razón y aumenta el cosquilleo en mi estomago— Es decir —Me trabo— Bueno, me entiendes, me emocionó.

—Supongo que sí —Respira un poco— Fueron muchas emociones y... ¿Podemos irnos de aquí?

Junto a la cafetería, atravesando unas puertas de vidrio está la cancha sintética de fútbol, por la hora no hay nadie así que la atravesamos con tranquilidad hasta llegar a las gradas de cemento. Tomamos asiento y sin darnos cuenta ya estábamos hablando de otra cosa.

—No, amo la música, pero al parecer ella no me a ama a mí —Dice Sven a la par de tener una muy pequeña sonrisa en su rostro— A veces es así.

—¿Y si pudieras volver a hacer música lo harías?

—Pues no lo sé, hace mucho que la música para mí solo es para escuchar.

—No quería decírtelo, pero cuando hablas de música, esos ojitos tristes tienen un brillo especial, se nota que aún amas la música mucho.

Baja la mirada mientras deja en su rostro una pequeña sonrisa, da un suspiro profundo y me mira.

—El amor no correspondido es cruel, pero hay que aceptar la realidad. La música y yo no estamos destinados —Saca su celular mientras este vibra— Dame un momento —Mira la pantalla un par de segundos —Debo irme.

—Vas a volver a hacer música ¿Verdad? Yo te ayudo.

—No lo creo —Se pone de pie.

—Si te convenzo haremos una canción juntos, será nuestro secreto.