¿Existe acaso una chica capáz de desafiar a más de 100 hombres? ¿Podría superar el sabor amargo de la traición y el dulce deseo de su mayor amor?
No existe otra chica que desee buscar sus sueños como Anne Bonny. Ella es capaz de desafiar bárbaros c...
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Llegada la mañama, habían pasado varias horas desde que Jack le propuso a Anne unirse a la tripulación. La costa estaba muy calmada estos días, más de lo común, pero con extrañesa de vez en cunaado olas fuertes golpeaaban la costa.
Dentro de la taberna de Don Jenkins, de repente se oyen a dos hombres hablar. Uno de ellos estaba ebrio.
- ¡Si la vida fuera ron! -Dijo uno de esos hombres. Mira a la botella que tenía en su mano y la abraza- ¡Ay, preciado ron! ¿Lo vez Mateo?- pregunta y repite- ¿Lo vez Mateo? -emocionado- ¡Cómo brilla!
- Si lo veo, Julio. El que no lo puede ver bien es usted- Responde el segundo hombre llamado Mateo, mientras agunta a su amigo por el brazo para que no se caiga.
- ¿De que me hablas Mateo?-
- Digo que estas más ebrio que una cuba- Respondió Mateo contra su amigo.
Julio responde indignado- ¿Yo ebrio? ¿Le puedes decir a la miel que es amarga?-
- Si le digo que la miel es amarga, mentiría- Contestó Mateo. Continúa- La miel es dulce. Ahora, ¿miento si digo que el agua del mar es salada? -Julio no responde, entonces Mateo dice- Julio, usted esta más ebrio que el vino-
Julio bebe de la botella ya dejandola vacía, indignado la lanza al suelo. Estaba tan mareado que hasta casi se cae con este acto. Gracias que Julio tenía a Mateo como amigo, sino ya se hubiera perdido y no lo volverían a ver nunca más, todo por culpa de sus boracheras.
Luego de que Julio se recompone un poco, levanta la mirada y ve que en frente de él hay una botella gigante. Emocionbado, pero a la vez sorprendido dice- ¡Mateo, Mateo! ¡He encontrado una botecha gigante de ron!-
Mateo mira al frente y solo ve a la joven Anne quien estaba como de costumbre en el muellle, pero esta vez, solo caminaba de un lado al otro. Anne estaba inquieta.
Julio viendo la botella de un lugar a otro dice con voz roncosa- ¡Mateo, hay que atraparla! ¡Esa botella es mía!-
-Eso no es una botellla de ron, Julio- respondió desesperanzado Mateo.
- ¿Cómo que no es una botella? ¡Mira bien Mateo! Mira sus curvas, Es una botella de ron y toda para mi-
Mateo ya enojado- ¡Julio deja de beber!-
Julio asustado por los gritos de Mateo responde- Tranquilo, pensaba compartirla contigo- le entra hipo.
Mateo, agarra la cara de Julio y enfoca su vista hacia donde estaba Anne. Entonces dice- ¡Julio, Julio! - Esto era para espabilarlo un poco- Esa de adelante no es una botella. Esa es la señorita Anne-
- ¿Anne?-
- Si Anne- Respondió Mateo- Esa que lo ha rechazado tantas veces-
- Esa mujer es más pesada que el sol al mediodía- Dijo disgustado Julio- ¿Cómo una mujer puede rechazarme? - con determinación- Volveré a intentar conquistarla- le vuelve el hipo.
