Mi Dulce Hanna

Epílogo.

Recuerda esto Hanna,

Fuimos el momento perfecto y lugar equivocado,

Y...

No hace falta decir cuánto tiempo pasó para tenernos otra vez porque lo sabes.

No hace falta decir cuánto sufrimos por las dos porque lo sabes.

No hace falta decir cuánto he esperado.

No necesito siquiera decirte el nombre de nuestros hijos porque te lo sabes de memoria.

Cómo la fecha de nuestro casamiento que usas para todas tus claves...

No necesito decirte nada.

Porque lo sabes.

Solo...quiero que ahora que terminaste de leer, recuerdes ese exacto momento en el que nos abrazamos con mucha fuerza y la euforia que corría en mi cuerpo me pidió a gritos que te alzara,mientras todos en el campus eran testigos de tan maravilloso reencuentro. De tan ansiado beso.

Porque ese día, un simple día, un día como cualquier otro, tu simplemente corriste hacia mi, recuperando tus memorias porque le quitaste las tripas a un bacalao. ¿Cuan estúpidamente extraordinario es eso?

Te amo, Hanna. Te amo y siempre te amaré.

Gracias por volver a mi.

Gracias por recordarme.

Gracias por encontrarme.

Gracias por salvarme.

Hanna...

Este libro, lo escribí para tí.

Para que jamás vuelvas a olvidar quien eres para mí.

Mi dulce Hanna.