One-Shots Teen Wolf

103- Isaac Lahey

Título: "No olvides la sensación de ser un hombre lobo"

Hace años que solo conozco la paz, en cuanto Isaac dejo Beacon Hills mucho de mis días dejaron de tener una razón para finalizarlos, estuve exactamente un año así, sin ánimos y sin problema que valiera la pena a mis ojos, él era mi único cómplice, al que entregaría mi corazón arrancándolo de mi pecho si el me lo pidiera, el hombre que jamás logre olvidar y sin importar cuanto lo intentase nadie podía provocar sentimientos en mi como Isaac lo hizo.

Fue tarde para mí, la cobardía que me caracteriza me empujo a jamás confesar ni siquiera un sentimiento de cariño hacia él, mi temor a su rechazo fue mayor a cualquier atisbo de esperanza que se cruzara ante mí.

-Cinco años, como te da la cara-murmuro para mí misma mientras conduzco de nuevo hacia Beacon Hills.

Luego de un año sin rumbo abandone la ciudad de mis orígenes, me busque la vida en Boston y todo este tiempo me he dedicado a estudiar, pero en cuanto Scott marco para decirme que en su fiesta de cumpleaños se encontraría Isaac Lahey no me controle, solté la confirmación sin siquiera dudarlo y luego no pude dejar de atormentarme. Cientos de escenarios cruzaron mi mente, pero en ninguno de ellos mi corazón gano, no importaba las ilusiones que me hiciese, ahora somos adultos.

Aquellos adolescentes que no podían dejar de verse para luego sonreír ya no existen, somos dos adultos que teniendo todos los medios jamás hablaron.

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Bajo de mi auto con mi maleta, mi amigo de la mandíbula chueca me convenció de quedarme unos días para aprovechar las vacaciones, golpeo su puerta, pero quien me abre no es el moreno.

-Hola...

Me quedo viéndolo unos segundos, sus rasgos angelicales ahora son más rudos, sus rizos dorados han oscurecido un poco, pero sus ojos azules siguen siendo los mismos que guardaba en mi memoria.

-Hola Isaac-digo bajo.

No puedo dejar de verlo y su incomodidad es notoria, el no tarda en rascarse la cabeza y mirar hacia atrás, supongo que en busca de ayuda.

-¿Vienes a quedarte?-él señala mi maleta.

-Ah esto... -acerco mi bolso a mi-Scott insistió... Si es molestia puedo ir a un hotel-retrocedo un paso atrás, pero él toma mi bolso.

Yo no lo suelto así que ambos lo sujetamos y nos miramos.

-No es molestia para nada, quédate... Me has tomado por sorpresa, no tenía idea de que vendrías-ante sus palabras yo suelto mi maleta.

No puedo atinar a decir nada, no me ves hace años Isaac y tu primera reacción es esta, como si yo estuviera demás.

-Oye Isaac, deberías de... Ahh hola ____ que bueno que llegaste, estábamos discutiendo que preparar para el almuerzo-dijo Scott tan alegre llegando a la puerta.

-Hola-intente regalarle una sonrisa, pero no fue necesario, me abrazo ayudándome a esconder la negatividad que se estaba apoderando de mí.

-Ven conmigo, te daré el cuarto de Isaac, él puede dormir en el sofá-exclamo Scott tomando mi mano y llevándome al interior de su hogar.

Detrás de mí solo oí como el rubio bufaba.

En cuanto llegamos arriba y entre al cuarto Scott me dio una de esas miradas que yo podría calificar como pena.