Rumbo a los polos - el sobreviviente

1) El paciente cero

Escribo esta historia inspirada en unas notas que encontré cerca del cuerpo de un muchacho encima de un bus, respetando su memoria voy a replicar lo que seguramente él escribió en sus últimos momentos de vida.

Mi historia comienza... o mejor dicho... la historia de los años de terror comenzó justo en mi trabajo, yo era enfermero en el hospital general de Detroit en USA, aquella trágica noche comenzó el inferno cerca de las 11 de la noche, yo estaba conversando con una compañera ya que la noche estaba aburrida, los índices delictivos habían bajado y ya casi no solían llegar tantos heridos por casos de delincuencia, pero todo cambió cuando trajeron a un tipo aparentemente latino, digo aparentemente porque no supe su identidad y solo por su rostro sabía que no era de ahí Estados Unidos. La cuestión es que lo entramos rápido para atenderlo ya que se estaba muriendo, presentaba los mismos síntomas que presentaban las personas antes de convertirse en un infectado, solo que en aquella ocasión no sabíamos de la existencia de esas cosas. El sujeto entró con los ojos amarillentos, botaba espuma por la boca, tenía una fiebre altísima y su presión estaba por las nubes. Rápidamente lo ingresaron para una intervención médica y hasta ahí supe de él ya que inmediatamente corrimos de nuevo hacia la entrada de emergencias porque había llegado otro herido, este fue víctima del primer sujeto ya que llegó con fuerte mordeduras en su cuerpo y al igual que el sujeto anterior, este tenía los mismos síntomas solo que con una heridas muy grandes y profundas producto del ataque recibido por el primer sujeto.

Una vez que ingresaron a los 2 sujetos para intervenirlos, mi compañera y yo regresamos a nuestros puestos de trabajo a continuar tirando chisme, quiero aclarar que tanto ella como yo somos chicanos por lo que dominamos tanto el inglés como el español asi que cuando conversábamos, lo hacíamos en español para que los doctores o quienes pasaran cerca de nosotros, no se enteraran de lo que hablábamos. Pasadas casi 2 horas, un doctor nos informó que el primer paciente ingresado había fallecido y que se había vuelto todo un dolor de cabeza porque actuaba muy extraño, se puso muy agresivo de la nada e intentaba querer morder a todo mundo estando él atado a su camilla. Lo inyectaron para dormirlo, pero nada le hacía efecto y ese tipo se volvía cada vez más loco, los doctores ya se habían comenzado a frustrar y ese sujeto hizo una especie de aullido para luego gritar cosas sin sentido y de la nada morir. Para nosotros fue súper extraño y hasta gracioso, pero con todo lo que he vivido ya sé porque aulló y gritó, intentaba contactarse con el otro sujeto al que había infectado, aun así, no entiendo porque murió de la nada, es algo que todavía no logro comprender, pero bueno... no me iré por las ramas y salirme del tema principal. La cuestión es que después de unas horas, habían logrado estabilizar al otro sujeto atacado que luego supimos se llamaba Paul Little. Ese sujeto no se veía nada bien por lo que me contaron... tenía heridas muy profundas por las mordidas, la sangre se le coagulaba súper rápido y la fiebre no le paraba para nada, alucinaba y balbuceaba cosas, también lo intentaron dormir pero nada le hacía efecto, él solo se la pasaba moviéndose lentamente de un lado a otro en su cama en la que por cierto, estaba muy bien amarrado.

Como a eso de las 4 de la mañana ocurrió el desastre, yo salía del baño y me dirigía hacia mi puesto de trabajo, entonces sonó la alarma de emergencia, es una alarma que teníamos en el hospital que indicaba cosas como ataques terroristas, alborotos o cualquier otro caso que suponía una amenaza dentro del hospital. Me dio algo de curiosidad saber que sucedía porque vi a los guardias desenfundar sus armas y correr hacia la zona en la que tenían a los que entraban de emergencia y directo a intervención. Me asomé un poco por el pasillo para observar que acontecía, pero solo veía a un grupo de personas mirar hacia otro pasillo, todos estaban aterrorizados y asustados, me acerqué nuevamente a ese grupo de personas para también ver qué pasaba y entonces escuché -¡"Quédate quieto o disparo"!- seguido del sonido de la arma que usan para inmovilizar a las personas. Más me dio curiosidad y corrí para ver que sucedía para luego quedarme impactado con una escena sacada de alguna película macabra de terror. Algunos cuerpos de doctores y familiares de pacientes yacían en el suelo con graves heridas, las paredes y el suelo de aquel pasillo estaban llenas de sangre, era todo tan... tan increíble que todavía no puedo encontrar una palabra para describir el horror que sentí al ver esa escena.