MALA COSTUMBRE

8- Proyecto en pareja

Luna y los Hódar vuelven tres días después de la noche en que hablé las cosas con Violeta, y vuelvo a cuidar de la niña las 24 horas del día.

Luna no hace más que preguntarme dónde ha ido Sam, y yo no hago más que explicarle que no ha podido pasar nada entre él y yo.

Después de esa noche, Violeta ha evitado mis ojos en todos los sentidos, y cuando no lo hace, yo lo hago con ella.

Hoy, Luna tiene cuatro horas de terapia con la Dr.a Morgado, y como el estudio está situado cerca de mi escuela de música, el Sr. y la Sra. Hódar me han dado permiso para recogerla los martes y los jueves de la fisioterapia.

A las tres voy a la clase de composición con el profesor Miralles. Hoy mirará nuestro trabajo y nos hará hablar de él delante de los demás.

-Oliver, me gusta mucho tu trabajo. Tienes una excelente destreza nel componer y me gusta mucho como escribes. El tema parece ser el mismo en las tres canciones, así que también me has contado una historia a través de estas...- Sonrío ante esas palabras -pero me gustaría saber más de eso...-

-Es el relato de una sencilla historia de amor entre dos mujeres. Una de ellas pensó que podía haber algo real, mientras que para la otra era una simple diversión. El final. Como se puede ver en la última hoja, al final la chica con grandes expectativas se quedó sola en su habitación mirando al techo..-

El profesor  no deja de escudriñarme y de apuntar todas mis palabras en su cuaderno, luego me dice que no pasa nada y sigue observando y dejando hablar a los demás alumnos.

Finalmente, decide asignarnos una tarea por parejas.

Acabo con una chica llamada Ruslana que no tengo ni idea de quién es.

-Hola- me dice apareciendo detrás de mí.

Cuando me doy la vuelta, veo la viva imagen de Violeta Hódar mirándome fijamente.

La unica diferencia es que ella tiene un septum en la nariz y el pelo largo.

Se parece a Vio de forma llamativa, tanto que ese parecido me atrae inmediatamente hacia ella.

-Oye, tú debes ser Ruslana no? - pregunto sonriéndole.

-Sí... y tú Chiara.. - responde dándome una sonrisa amable.

-Parece que tendremos que trabajar juntas- comento retóricamente, sonriéndole sinceramente.

Empezamos a hablar y a esbozar el proyecto que nos asignó Miralles, pero al final decidimos quedar al día siguiente en casa de los Hódar.

A las seis, me dirijo a la consulta de la Dr.a Morgado y cuando llego, Luna me saluda orgullosa, mientras una hermosa mujer a su lado le acaricia el pelo, sonriéndole.

-Hey Lulú siento el retraso pero el profe nos ha tenido atrapados hasta ahora- admito justificando mi retraso.

-Tranquila Kiks...- me dice y cuando me acerco a abrazarla, me siento escudriñado por la chica de la bata de laboratorio.

-Usted es la Dr.a Morgado, mi fisioterapeuta. - Dice antes de que mis ojos se encuentren con los verdes esmeralda de la mujer.

-Doctora, esta es mi niñera, Chiara. Es la mejor niñera del mundo- dice presumiendo mientras yo intento callarla haciendo una señal tras otra.

-Y además es soltera...- añade entonces a la doctora que empieza a reírse divertida por el descaro de la pequeña Hódar.

-Hey hey diablillo, no te cuento mis cosas para que las cuentes por ahí...- le digo bromeando antes de darle un ligero golpe en la cabeza, aunque no tengo ni idea de por qué le ha dicho eso.