La mudanza se llevó a cabo después de un mes, entre apuros y risas, la emoción era notable, no había mucho que mudar la mayoría de los muebles de Pauline quedaron en el primer departamento y la mayoría de los muebles ya estaban cuando ellas llegaron. Con las cosas en lo de Juliana ambas tres se sientan con Olivia en medio del sillón
—¿Qué les parece salir a celebrar este nuevo comienzo las tres?
—Siii mami, vamos a comer hamburguesas.
—A dónde quieras mi vida. Pero primero a bañarse, estamos todas sucias y transpiradas —dice Juliana—. Vamos que te baño.
—No mami, soy grande y mamá me enseñó como bañarme, yo podo sola —Pauline le sonríe y asiente— está bien, estás creciendo demasiado rápido, pero está bien.
La niña corre al baño sola, quiere sentirse grande y tener autonomía, con tan solo tres años, Olivia es toda una niña independiente. Juliana mira a su novia a su lado y enlaza sus manos, se acerca más a ella.
—Amor estoy transpirada.
—Bueno eso nunca ha sido un impedimento para besarte —se coloca encima de ella en el sillón—, podemos besarnos hasta que Oli salga del baño y espero que le gusten las duchas largas —la besa y Pauline sonríe en medio del beso—. Quiero una cita contigo como pareja, empezamos al revés y es importante para mí eso.
—Tenemos una hija, me pides ser tu novia, me traes a vivir contigo y ¿ahora me pides una cita? —Juliana ríe.
—Bueno mis métodos son poco convencionales y si lo dices así, suena algo mal. Pero no me has dado una respuesta.
—Sí —le acomoda el cabello tras su oreja—, claro que si.
Están dándose un poco de amor, besos, caricias y mirándose a los ojos se dicen lo mucho que se aman.
Olivia sale de bañarse, se dan un beso más y mientras Pauline la va a vestir, Juli se mete a bañar, luego le toca a ella, les encantaría bañarse juntas, pero no con una niña de tres año que podría hacer un verdadero desmadre.
—Entonces vamos.
Llegan a un McDonald's y no es el lugar más pintoresco o el que Juliana considera el mejor, pero mira a su novia e hija y se da cuenta, que ni siquiera importa si están comiendo a la orilla de la calle en un carrito de comida, lo que importa es que finalmente está dónde y con quién quiere estar, ama a estás dos y ellas la aman de vuelta, que importa el lugar.
—Mami —Juliana siempre dibuja una gran sonrisa cuando Olivia la llama así— ¿Serás mi mami para siempre?
—Eso espero mi amor.
—¿Entonces serás su marida?
—Sí y tú me ayudaras a que tu mami me diga que sí.
La charla entre ambas sigue y por primera vez en mucho tiempo desde que ambas probaron los límites de su heterosexualidad, Pauline quién siempre tuvo miedo de demostrar su amor en el pasado con Faith en público, decide no cometer el mismo error con Juliana y le toma la mano, ganándose una sonrisa de parte, sabe que este es un gran paso para Pauline. Se acerca a ella tanteando un poco el terreno y Pauline le regala un beso, sin apuro, sino con detenimiento y amor.
Tres días después ambas tienen su primera cita como pareja, Juliana ha planeado el día perfecto. Olivia se quedó con Luke, Tricia y Mike, para fortalecer la relación con la niña, Tricia está más que feliz de ser abuela.
—Estas hermosa esta noche —le dice Juliana mientras le entrega un ramo de 3 rosas y le abre la puerta del auto— ¿Está lista novia mía para nuestra primera cita?
—Mas que lista, por cierto —Pauline le entrega un ramo de tres rosas rosas—, también estás bellisima hoy, mi amor.
Se saludan con un beso y se suben al auto, Juliana conduce hasta un pequeño restaurant, es bastante acogedor y familiar justo como le gusta a Pauline.
—¿Te gusta el lugar? —la de ojos verdes asiente fascinada mirando todo— es una reliquia familiar, sus dueños vienen pasando de generación en generación y la comida es como me describiste que querías que fuera la tuya alguna vez.
—Me encanta —se acerca y la besa—, me encanta como prestas atención a los detalles.
—¿Cómo no hacerlo con la mujer maravillosa que eres y que aceptó ser mi novia? Me haces muy feliz Pauline, ese día en el supermercado, no sé quién salvó a quien.
—Ambas nos encontramos cuándo más nos necesitábamos.
Traen la comida, en un escenario improvisado una chica solista toca la guitarra, su cabello colorado y sus ojos con heterocromia resaltan, pero su voz es la mejor melodía del lugar. El restaurant le da la oportunidad a artistas locales y se llevan algo de dinero cuándo los comensales pagan el derecho a show.
—Tiene talento.
—Sí, lo tiene.
—¿Cómo la estás pasando?
—Bastante bien, buena compañía, buena comida y un buen vino ¿Que más puedo pedir? —sonríe Pauline—. Te puedo confesar algo —Juliana asiente—, nunca imaginé que estaría en pareja con alguien que pudiera amar tanto a mi hija como la amo yo, que me haría sentir en casa en cualquier lugar y que con su sola presencia mi día mejorara. Gracias —le da una sonrisa honesta.
—Yo no supe que esto era lo que tanto había estado esperando, hasta que las conocí. Has logrado sanar lo que no rompiste y te quedaste incluso conociendo mi peor versión. Concuerdo con lo que me dijo una amiga una vez, cuando es la persona incorrecta ni siquiera en tu mejor le va a ser suficiente, pero siendo la persona correcta, incluso en tu peor versión le serás suficiente.
—Que lindo es haberte encontrado Juli.
—Hermoso Puli, hermoso.
Caminaron un rato por los alrededores, y se sentaron en un banco a tomar un helado, sin apuro de volver a casa ya que Olivia se quedó acampando por primera vez en el patio de la casa de Tricia con sus abuelos, se tomaron la primer noche libre para ellas.
Al llegar a casa no había una urgencia desesperada por probarse, así que se tomar la mano y en una danza de besos se dirigieron a la habitación. Hicieron el amor suave, despacio y explorando cada pedazo de piel la una de la otra, fue un acto pausado lleno de entregas y caricias, de te amos después del orgasmo, de volver a empezar hasta sentirse saciadas.
Quedan abrazadas como tantas veces antes, Pauline le acaricia la espalda mientras Juliana descansa sobre ella y le acaricia el brazo.
—Es la primera vez que hago esto, así.
—¿El amor?
—Sí, nunca había estado con alguien de la manera tan íntima y cuidada, como lo acabamos de hacer ahora.
Pauline había experimentado eso antes con Faith, ella había sido la primera persona con la que realmente había hecho el amor, pero con Juliana ha sido diferente, la conexión entre ellas, el erotismo al tocarse, la búsqueda por el placer de la otra. No quiere decirle que no es su primera vez, no puede mentirle así, así que opta por decirle una verdad igual de importante.
—Y lo haremos muchas veces más, porque te amo.
—Tambien te amo —le regala un beso.
Podrían sentir que tienen que aprovechar el tiempo y repetir cuántas veces sean necesarias, para gemir sin tapujos en voz alta, pero no es necesario tienen toda una vida para noches desenfrenadas de pasión, ahora solo quieren disfrutar de la cercanía la una de la otra en la intimidad de sus caricias.
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Un amor puerta a puerta
Storie d'amoreLas coincidencias no existen, no para ellas. El destino ha planeado este encuentro desde hace demasiado tiempo y justo ahora no va a echarse atrás, ellas deben estar juntas. El mismo día que Juliana deja a su novio, a Pauline la deja su novio de la...