—Narra Felix—
—Tu cuerpo y alma me pertenecen
Siempre ha Sido así...Meses después...
(~ ̄³ ̄)~Los gemidos de Hyunjin me hacen perder la cordura, sentir sus uñas arañando mi espada y sus piernas abrazar mi cintura, me vuelven completamente loco, Hyunjin es mi paraíso y mi infierno, estar dentro de él se siente como lava ardiente recorriendo todo mi ser pero también es el frío que calma mi calentura cuando es él quien está dentro de mí.
—M-á-s fuerte por favor— lo escucho pedir y como puedo negarme a cumplir su petición si en este momento yo soy su puto esclavo y estoy aquí para obedecer cada una de sus ordenes.
Aumento las embestidas y siento sus piernas aferrase con fuerza a mis caderas y mierda esto es tan placentero tan malditamente delicioso.
Han pasado exactamente tres meses desde que nos volvimos a encontrar y puedo decir que todo va de maravilla, ya no he tenido la necesidad de borrar sus recuerdos y el padre de Hyunjin me teme y le tiene estrictamente prohibido a Hyunjin acercarse a mí, según él voy a “Corromper a su pequeño” ja si supiera que su pequeño le da el mejor orgasmo al diablo mientras lo folla duro en el mismísimo infierno.
—¿Quieres más fuerte cariño?— Hago la última pregunta antes de acelerar mis embestidas y tocar ese punto dulce y hacerlo llegar al climax, no espero una respuesta de su parte, le doy una última embestida y ambos soltamos gemidos a coro cuando nos deshacemos de nuestra escencia.
Nuestros cuerpos cansados y completamente sudados quedan sobre la cama, ambos estamos jadeando con la garganta seca de tanto gemir.
—Eso estuvo genial— Hyunjin dice luego de unos minutos, recuesto mi cabeza sobre su pecho, cierro los ojos y me concentro el latir de su corazón, su cuerpo es tan cálido y suave.
—Tú eres genial— Le respondo levantando mi cabeza para verlo a los ojos y mierda debería ser pecado ver a Hyunjin despeinado, sudado y con una sonrisa dibujada en su rostro.
—Tu padre llegará pronto ¿Debería irme?— Le pregunto con un tono sarcástico ya que ambos sabemos que es casí imposible separarnos aunque debemos hacerlo ya que tengo asuntos pendientes en el infierno.
—¿Tú quieres irte?— Y está más que claro que no me quiero apartar de sus cálidos brazos y se lo hago saber cuando me vuelvo a recostar en su pecho y me aferró a su cuerpo, maldición se supone que el diablo no debería tener ninguna debilidad pero Hyunjin se está convirtiendo en la mía y eso no es una buena señal.
—Sabes que no— Esa sería mi respuesta pero la voz de Jeongin retumba en mis oídos y Dios, últimamente los humanos están irritandome junto con el demonio de la lujuria, más de mil almas llegan al infierno cada hora y se que mi trabajo es procesarlos pero creo que estamos llegando al final de los tiempos por que prácticamente se estan matando unos con otros, las guerras estan desatadas, los terremotos son mas constantes y ni hablar de las pestes y el hambre que hay el mundo.
—Cariño sabes que no me quiero ir pero el deber llama, Jeongin ya no puede controlar a las almas y a los demonios, tengo regresar o habrá una guerra en el infierno— Ví hacer un puchero a Hyunjin (tan adorable) al momento de levantarme de la cama y empezar a vestirme.
—¿Puedo ir contigo?— y Dios sabe cuanto deseo llevarlo de una vez por todas al infierno conmigo y coronarlo como mi príncipe pero tendría que matarlo para que él se convierta en lo que está destinado a ser y yo soy incapaz de quitarle la vida sabiendo que tiene un largo camino que recorrer para llegar a convertirse en lo que un día será “El ángel de la muerte y el príncipe del infierno” Hyunjin gobernara conmigo el infierno y eso ya esta escrito.
—No puedes ir conmigo amor, lo siento—
—¿Por qué no puedo ir?— Hace una rabieta.
—Por que cuando una alma humana entra al infierno y vuelve a la tierra, parte de ella queda en ese lugar, te marchitarias al igual que una flor si te sigo llevando conmigo— Bueno en realidad con él no funciona por qué prácticamente su alma me pertenece pero mientras él esté con vida prefiero que disfrute de los placeres de la tierra, que disfrute de su libre albedrío por que en un futuro él sera completamente mío.
—No me importa, total mi alma ya es tuya mi rey. Dime ¿Cuántas veces tengo que ir al infierno para quedarme a vivir en el Reyno de las tinieblas contigo?—
—Diez veces más y entonces me perteneceras, una vez le entregues tu alma al diablo te estarás condenando al fuego eterno—
—Bueno, tengo sexo con el diablo ya le entregué mi cuerpo así que mi alma viene en el combo— Sus ojitos me miraban como un cachorro rogando a su amó y mierda es Hwang Hyunjin es mi angel y no le puedo negar nada y como dije antes... Soy su fiel esclavo.
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Jinlix: Cuando El Diablo Se Enamora
Viễn tưởngEl diablo no tiene ninguna debilidad. Hwang Hyunjin un humano considerado como el príncipe del infierno entre los demonios no es considerado la debilidad del diablo apesar de que este este perdidamente enamorado de su humano.