--Realmente ahora entiendo cómo se sintió Twilight en los juegos de la amistad. -- Sunset Shimmer sonreía mientras cerraba levemente los ojos. -- ésto es reconfortante -- Tocaba suavemente el pelaje del conejo con mucho cuidado, disfrutando de la sensación en su piel.
-- ¿Verdad que sí? Siempre es lo más adecuado cuando alguien se siente triste -- Comentó la pelirosa un poco tímida -- al menos para mí...--
Guardaron silencio unos segundos, se mantuvieron así; sencillamente sentadas la una al lado de la otra, mirando al conejo derretirse en las caricias.
Un día caluroso, sin duda, pero perfecto para estar al aire libre.
-- ¿Lograste entregar todos los volantes?-- Las mejillas de Fluttershy se encendieron rápidamente. Agachó la mirada hacia sus manos (llena de papeles) y sonrió torpemente.
-- Si quieres puedo ayudarte.--
Y así se levantaron de su lugar junto a la estatua escolar, dirigiéndose a cada persona que encontraban. Por un instante Sunset Shimmer se detuvo a contemplar a su amiga, quien con mucha delicadeza hablaba con otros estudiantes acerca del refugio de animales.
Un recuerdo fugaz vino a ella. Parecía que hubiera sido ayer cuando cruzó el portal buscando la corona desesperadamente, para enterarse que aquella chica se la había llevado a la directora Celestia.
Se encontraban ahora en el mismo lugar, miércoles como en aquel entonces. Y sin embargo, sus circunstancias no podrían ser más diferentes. Nunca se habría imaginado que las cosas resultarían de esa manera, ella y Fluttershy como amigas, repartiendo volantes juntas en el mismo lugar donde su destino cambió para siempre.
Sunset Shimmer se acercó al portal en silencio y tocó suavemente la superficie. La magia cosquilleaba sus dedos con una fuerza irresistible. ¿Hacía cuánto que no volvía a Equestria? Estaba tan acostumbrada a aquel otro mundo que rara vez pensaba en su antiguo hogar. Ni siquiera podía ya recordar cómo era el sentir sus cascos sobre la tierra, el galopar por la academia y usar su cuerno para transportar sus libros por la biblioteca. Aquellos días eran ahora tan lejanos...se preguntaba si acaso los había vivido realmente.
-- Creo que he terminado -- La tenue voz de su amiga la trajo de vuelta a la realidad.
-- Genial, vamos a reunirnos con las chicas, las clases comenzarán pronto--
Dio una última mirada hacia el portal antes de entrar a la escuela. Sí, realmente había pasado mucho tiempo...
***
--.¿Tal vez podría...acompañarte esta vez?-- La joven de pelo rosa la miraba confundida, preguntándose en su interior a qué se referia. ¿Acompañarla...? Antes sus dudas evidentes, Sunset Shimmer sonrió con gracia. -- Sí, acompañarte al refugio de animales--
Era la primera vez que lo hacía.
Observó maravillada cada rincón del lugar, sin duda el amor que Fluttershy daba a sus animales superaba cualquier barrera entre razas. Sin duda Fluttershy sabía lo que era la compasión. Sunset Shimmer se sentía protegida en aquel refugio, lleno de bondad.
-- Algunos se encuentran un poco heridos, las personas no suelen fijarse por dónde van. -- Decía por lo bajo acariciando un pequeño gato con una pata vendada. -- O tal vez lo hacen, pero les da igual-- Cada vez más bajo.
-- Tal vez era lo que sucedía conmigo, ¿no lo crees?--
Fluttershy levantó la cabeza.
--¿ A qué te refieres?--
-- Yo también iba por la vida sin fijarme por dónde iba -- Una tenue sonrisa de ojos tristes cruzó su rostro -- ¿Recuerdas?--
-- Evidentemente --
Ante la mirada atenta de Sunset Shimmer, Fluttershy escondió su cara entre el cabello débilmente. Una suave risa impregnó el aire. Sin duda Fluttershy no era exactamente prudente, a veces.
-- Hey...Fluttershy, ¿crees que tengas...una venda para mi herida?--
Tímidamente volvió a mirar hacia su amiga, ¿herida? ¿Dónde?
Entonces sus ojos se dirigieron hacia donde señalaba el índice de Sunset Shimmer: Su corazón.
Con suma delicadeza sacó de su bolsillo un pequeño pañuelo, mismo que en un tiempo atrás fue usado para limpiar un rostro, que en esta ocasión no era el suyo.
Igual a aquellos animalitos heridos que cuidaba con tanto amor, Fluttershy se acercó a Sunset Shimmer y secando sus lágrimas le abrazó.
Sin duda, era una chica realmente amable.
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La magia del amor (Sunset×Twilight)
FanfictionLágrimas caían como lluvia de meteoros cristalinos a lo largo de sus mejillas. Un sollozo escapó de sus labios mientras débilmente levantaba el rostro y con vergüenza evitaba los ojos de todos los presentes en aquel lugar. La voz de la princesa se...